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El Viktoria Plzen tiene más de 100 años de historia; sin embargo, apenas ha ganado la liga de República Checa en cinco ocasiones. Su historia es modesta, pero eso no le impidió complicar al 13 veces campeón de Europa, Real Madrid, y exigir al cuidapalos costarricense Keylor Navas.
Pese a eso, los merengues ganaron 2-1 para asumir el liderato del Grupo G, con seis unidades, seguidos por la Roma, con seis, y el CSKA Moscú con cinco.
El partido era vital para el conjunto blanco por el momento que vive, pues los madridistas tenían cinco partidos sin conocer la victoria y además el reto de visitar al Barcelona, este domingo a las 10 a. m.
El duelo se inició con un Madrid presionado. Julen Lopetegui, técnico blanco, de pie a la par del banquillo vivía con intensidad el duelo frente a una escuadra, en el papel, de mucho menor jerarquía que la propia.
Keylor disfrutó nuevamente de la titularidad y sumó su sexto juego de la temporada. Aunque recibió un gol, su actuación fue buena. De hecho, en un momento fue clave para evitar el 1 a 1 momentáneo.
En el campo no se ve el Madrid poderoso, se le nota timorato, carente de seguridad. Al cuadro de Navas no se le puede cuestionar su disposición ofensiva, porque sí la tiene; ellos crean muchísimas opciones, pero también permite que le generen acciones en su área.
Marcelo entregó un balón por izquierda mal y el Viktoria estuvo a punto de marcar, también Ramos falló en una uno contra uno para provocar el murmullo entre los aficionados, el Real no se veía bien.
La primer acción que tuvo el mundialista de Brasil 2014 y Rusia 2018 fue clave, Keylor achicó, ganó y en un saque de puerta ejecutado con rapidez le dio la oportunidad al Madrid de llegar a su primer celebración por medio de Karim Benzema, al 11′.
El partido continuó; no obstante, con la llegada del pitazo para el descanso los silbidos se apoderaron del Santiago Bernabéu.
Para el segundo tiempo, la situación no cambió mucho. El Real anotó un gol más, por intermedio de Marcelo (55′) que sirvió para que la gente presente en el reducto aplaudiera a los que salieron de cambio y olvidaran el mal trago de la inicial.
Empero, llegó el balde de agua fría que dejó helados a los blancos, cuando Patrik Hrošovský marcó y la lluvia del silbidos volvió a apoderarse del Bernabéu. Dicha anotación fue al 78′.
Hrošovský se quitó dos marcas, ingresó al área y disparó de derecha al palo izquierdo del cuidapalos para vencerlo. Keylor voló, pero no pudo desviar el esférico.
Para agregar una dosis de sufrimiento, los merengues terminaron con 10 jugadores en la cancha, pues Marcelo no pudo continuar debido a una lesión, que tuvo al 87′.
“No cerramos el partido marcando más goles, tuvimos numerosas ocasiones de gol, el equipo viene de donde viene y si no marcas, aparecen los nervios, queríamos ganar y jugar bien, por momentos merecimos más, pero estamos en una dinámica en la que nos cuesta marcar, hay que aceptarlo. Se priorizó conseguir los tres puntos que rompían una racha que se ha alargado demasiado y queríamos terminar”, sentenció Julen Lopetegui después del encuentro.
Consultado sobre la posibilidad de continuar en el banco, el timonel fue claro que él se imagina dirigiendo el clásico español.
“No es para mí esa pregunta, estoy convencido de que sí (estará en el clásico) y estamos pensando en preparar el partido del domingo, que es muy importante e iremos con mucha ambición”, concluyó.
Los números de Navas ante el Plzen.
3 Paradas efectivas.
2 Balones aéreos atrapados.
1 Achique efectivo.
7 Saques buenos.
1 Pase mal dirigido.
1 gol recibido.
