
La variante K de la influenza AH3N2 está en Costa Rica. El Ministerio de Salud lo confirmó la mañana de este lunes.
El Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa) tomó muestras entre setiembre y noviembre y confirmó que desde octubre circula esta variación.
Hasta hoy se han identificado siete casos, todos con síntomas leves y sin necesidad de hospitalización.
En comunicado de prensa, Salud aclaró que no se ha observado un aumento en la gravedad de los casos de influenza, ni en hospitalizaciones o fallecimientos. “No obstante, las temporadas donde predomina la influenza AH3N2 suelen afectar con mayor fuerza a los adultos mayores”, destacó.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que pese a las mutaciones del virus, la vacuna contra la influenza sigue siendo efectiva, especialmente para prevenir hospitalizaciones. Por ello es fundamental que niños, adultos mayores y quienes tienen factores de riesgo estén vacunados.
“La evolución genética observada en el subclado K forma parte del proceso natural de variación del virus de la influenza estacional”, destacó la OPS en un comunicado.
La OPS confirmó que esta variante está relacionada con un aumento de casos en América del Norte y Europa.
“Se insta a tratar oportunamente los casos y a preparar los servicios de salud ante una posible actividad temprana o más intensa de enfermedades respiratorias”, indicó.
¿Cómo es la variante K?
Un manuscrito (también llamado preprint) elaborado por la Universidad de Guatemala detalló algunas características. Los manuscritos no han sido revisados por pares, un proceso en el que especialistas analizan los estudios para verificar consistencia, relevancia y valor, y con ello se publica en una revista científica.
Este manuscrito, disponible en el sitio Research Gate, señala que existen mutaciones, llamadas mutaciones T135K y K189R, que podrían evadir parcialmente la eficacia de las vacunas o de infecciones anteriores, pero la OPS recalcó nuevamente que la vacunación sigue siendo eficaz y clave para prevenir casos graves.
Por lo demás, no hay diferencia en la gravedad de los síntomas. La influenza, también llamada gripe estacional o común, causa fiebre, tos, malestar general y dificultad respiratoria. En los casos más graves puede inflamar los bronquios y pulmones, hospitalizar e incluso causar la muerte.
¿Qué hacer ante la variante K?

Estas son algunas acciones recomendadas por especialistas:
- Mantenga los esquemas de vacunación al día.
- Lávese las manos con frecuencia. El alcohol en gel es un “plan B” si no hay agua y jabón.
- En caso de síntomas respiratorios evite salir, si debe hacerlo, utilice mascarilla. Este implemento debe cubrir nariz, barbilla y mentón.
- Busque atención médica cuando sea necesario, vaya al Ebáis más cercano o con su médico privado de preferencia.
- Cúbrase al toser o estornudar con pañuelo o antebrazo.
- Evite aglomeraciones, especialmente con niños pequeños y adultos mayores.
- Mantenga la distancia de personas con síntomas respiratorios.
- No automedique a niños ni a adultos mayores.
- Prefiera actividades al aire libre o en lugares ventilados.
- No lleve a actividades masivas a personas con fiebre, tos, diarrea o vómitos.
- Evitar la exposición al humo del cigarrillo o vapeadores.
- Promueva la lactancia materna exclusiva en menores de 6 meses.
Estas medidas también previenen otros virus respiratorios. El lavado de manos también evita enfermedades gastrointestinales.
