Un traje con una cruz bordada en dorado luce la imagen de la Negrita, tras la esperada ceremonia de vestición realizada esta mañana de viernes.
El vestido proviene de una madre vecina del sur del país, quien agradece por la sanación de su hijo de una enfermedad compleja, dijo el sarcerdote de la basílica, José Francisco Arias.
Inicialmente, antes de la misa, Arias dio a entender que tres fieles presentaron igual cantidad de trajes. Sin embargo, en la ceremonia aclaró que los tres vestidos fueron elaborados por la misma mujer, quien pidió guardar su identidad.
De igual forma, el sacerdote negó que quien elaborara la prenda fuese vecina de San Isidro de El General, en Pérez Zeledón: "Solo podemos decir que es una mujer del sur del país -Costa Rica- quien pidió que guardáramos sus datos", reiteró.
Cientos de devotos siguieron el esperado acto celebrado hoy, viernes, en una misa presidida por el obispo de Cartago, José Francisco Ulloa.
"Cada año, nos congregamos para cambiar el vestido a la Virgen de los Ángeles, al mirar ese vestido, recordemos que María camina con nosotros", dijo el obispo Ulloa.
"Estoy seguro de que María vivió siempre contenta y alegre (...) la alegría de María consiste en servir a los demás, en darse a los otros, como lo hizo al visitar a su prima Isabel", agregó el cura, en su reflexión del evangelio.
Tal y como ha pedido el papa Francisco, el obispo dirigió peticiones por un arreglo pacífico del conflicto Palestina-Israel.
Desde temprano, cuerpos de seguridad, socorro y voluntarios reciben a los romeros, en una larga jornada que se extenderá hasta mañana, 2 de agosto, fiesta de la Virgen de los Ángeles.