Con el voto unánime de todas las fracciones políticas, el Concejo Municipal de San José aprobó un nuevo Reglamento de Comercio al Aire Libre.
El reglamento autoriza la actividad comercial utilizando espacios públicos adyacentes, como aceras, a negocios establecidos.
Este reglamento se basó en la publicación en el Diario Oficial La Gaceta de la Ley N.° 10126, Ley de Comercio al Aire Libre, publicada el 9 de febrero de 2022, informó la Municipalidad de San José este miércoles.
La nueva normativa autoriza temporalmente a establecimientos gastronómicos (sodas, restaurantes y similares) con patente en propiedad privada a instalar mobiliario liviano (sillas y mesas) en zonas públicas como aceras, calles o paseos peatonales, con el fin de dinamizar la economía local y generar entornos más atractivos para la convivencia urbana.
Gobierno local aclaró que una solicitud de uso no garantiza su aprobación, dado el carácter público y demanial de los espacios que se regulan.
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“El reglamento nos permite brindarle herramientas a los patentados interesados en operar en espacios públicos y nos ayuda a ordenar mejor estas zonas para fomentar la convivencia y la visitación”, expresó el alcalde Diego Miranda Méndez.
¿Cómo funcionará?
Según la Municipalidad, las autorizaciones serán temporales, personales e intransferibles, y en ningún caso otorgarán derecho de propiedad sobre los bienes públicos como ceras, calles o pasos peatonales.
Solo se permitirá el uso de mobiliario removible, como mesas, sillas o sombrillas, que deberán retirarse al finalizar cada jornada.
El reglamento establece lineamientos precisos para resguardar la seguridad, el libre tránsito y la funcionalidad del espacio público:
- Aceras: se debe mantener al menos 1,20 metros libres para el paso peatonal.
- Intersecciones: se requiere un retiro mínimo de 10 metros (excepto en bulevares).
- Paseos peatonales (bulevares): el espacio transitable no podrá ser menor a 5 metros.
- Ciclovías: se deberá respetar por completo el área destinada a circulación.
También se prohíbe ocupar áreas sensibles como zonas de carga y descarga, accesos a viviendas, paradas de autobús, espacios frente a hidrantes y cualquier punto donde la movilidad se vea comprometida.
Prohibiciones y controles
La normativa prohíbe colocar infraestructura permanente, alterar el diseño urbano, realizar actividades distintas a las autorizadas, dañar el espacio público, o colocar publicidad no permitida.
Asimismo, se impide incitar comportamientos que atenten contra la moral, el orden público o grupos vulnerables.
El proceso de autorización comenzará con la presentación de la solicitud ante la Plataforma de Servicios de la Municipalidad. La Sección de Patentes y la Comisión de Comercio al Aire Libre analizarán cada caso y elevarán una recomendación al Concejo Municipal para su resolución final.
Una vez aprobada, se emitirá una licencia y se definirá un canon por ocupación del espacio, el cual deberá pagarse por adelantado.
La Municipalidad enfatiza que la sola presentación de la solicitud no garantiza su aprobación, dado el carácter público y demanial de los espacios regulados.
Según Miranda, la idea del reglamento es fomentar el desarrollo económico local e impulsar “entornos más amigables para los ciudadanos”.
