
Desde el fin de la pandemia y con la reactivación económica en marcha, el negocio de telecomunicaciones del Grupo ICE muestra un deterioro sostenido en su generación de ingresos, según revelan sus estados financieros.
Hasta el 2019, esa actividad aportó ¢607.645 millones a la empresa pública, lo que representó un crecimiento del 3,56% (¢20.862 millones más) en comparación con el 2018, de acuerdo con los reportes financieros de ambos años.
Sin embargo, el impacto de la covid-19 durante el 2020 y 2021 provocó un desplome en esa entrada que, en el 2020, generó ¢580.471 millones, es decir, ¢27.174 millones menos que en el 2019, para una disminución de 4,47%.
Al cierre del 2021, el monto bajó a ¢564.995 millones, lo que significó una reducción de ¢15.476 millones respecto al año anterior (una variación de -2,67%).
En ese segundo año de la pandemia, el ICE dejó de percibir ¢42.650 millones respecto a su desempeño del 2019, por ventas de servicios de telefonía (celular y fija) y enlaces fijos de Internet.
Con la reactivación económica tras las campañas masivas de vacunación y la eliminación de restricciones al movimiento, el ICE reportó una mejoría en 2022. Ese año, las ventas subieron en ¢9.446 millones y cerraron en ¢574.441 millones, para un alza de 1,67%.
No obstante, esa recuperación no se extendió.
Entre 2023, 2024 y los primeros meses del 2025, las sumas volvieron a caer en ¢37.519 millones, según los últimos estados financieros divulgados por la institución en abril.
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En 2023, el ICE reportó ingresos por telecomunicaciones de ¢551.256 millones, una baja de ¢23.185 millones frente al 2022. Para el 2024, la cifra descendió a ¢543.934 millones, ¢7.322 millones menos que el año previo.
Además, estados financieros intermedios divulgados por el ICE el jueves reflejan la misma tendencia durante el primer trimestre de este 2025, cuando ingresaron ¢129.544 millones, cifra menor en ¢7.012 millones respecto a los ¢136.556 millones del mismo lapso del 2024.
Este desempeño coincidió con una menor participación del ICE y su marca kölbi, el año pasado, en la provisión de líneas de Internet a hogares y suscripciones a televisión paga, según la Encuesta de Acceso y Uso de los Servicios de Telecomunicaciones 2024, elaborada por el Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) y divulgada la semana pasada.
En Internet a hogares iba en cuarto lugar, y en televisión por suscripción, de quinto, según la encuesta.
También en el mercado de líneas celulares va perdiendo participación, reflejan estadísticas de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel).
Eso no es novedad: el ICE ha venido cediendo terreno allí desde hace años. De todos modos, desde la apertura del mercado nacional de telecomunicaciones en el 2011, el ICE se ha mantenido como la empresa que más factura en telecomunicaciones.
Entre el 2014 y el 2019, sus ingresos representaron entre el 81,4% y el 79,4% del total generado por todo el mercado costarricense, según reportes de Sutel.
En 2023, el ICE captó el 75,3% de la suma total por ventas del sector, que ese año alcanzó ¢732.363 millones. Los datos correspondientes al 2024 serían divulgados por Sutel en julio.
¿Qué pasó con el ICE luego de la pandemia?
Consultada por este diario, la Gerencia de Telecomunicaciones del ICE explicó que la generalidad de ingresos del mercado nacional no ha tenido un crecimiento significativo desde el 2020.
“En general, la tendencia observada en la industria global y nacional es que los usuarios reciben cada vez mayores beneficios por menores precios”, afirmó la entidad, en referencia a una menor captación de dinero debido a la competencia.
Los datos de Sutel respaldan esa afirmación: entre el 2020 y el 2023, las ventas totales de esta industria aumentaron apenas 0,43%, al pasar de ¢729.200 millones a ¢732.363 millones, una diferencia de solo ¢3.163 millones.
“El ICE ha orientado sus estrategias a maximizar la experiencia del cliente, ampliando los beneficios y las capacidades de consumo, especialmente en segmentos clave como el postpago, donde seguimos liderando el mercado, según los estudios más recientes de Sutel”, indicó la institución.
Eso también es cierto: al 2023, kölbi retenía el 41,8% de las líneas pospago frente a las marcas Liberty y Claro. Este segmento registra el mayor aporte económico promedio por usuario.
“Esto evidencia que, pese a los retos, kölbi mantiene su posición como el operador líder en el mercado de telecomunicaciones, con significativa participación en los segmentos de alto valor”, añadió la entidad.
No obstante, kölbi sí perdió 15,5 puntos porcentuales en ese segmento en los últimos cuatro años. En el 2019 tenía el 57,3% de todas las suscripciones postpago, según las cifras de Sutel.
El ICE declinó referirse a esta caída tanto en las líneas postpago como en las prepago. En estas últimas también perdió el liderazgo, al pasar de un 48,8% de suscripciones en 2019 a un 28,3% en 2023.
“Actualmente, estamos enfocados en fortalecer nuestras redes móviles 4G y 5G, así como en el despliegue de fibra óptica”, concluyó la institución.
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Traba en 5G
El ICE también ha enfrentado retos por una medida cautelar solicitada por el Frente Interno de Trabajadores del ICE (FIT-ICE) que atrasará al menos un año el lanzamiento de su red 5G.
La acción legal ante el Tribunal Contencioso Administrativo fue contra el decreto ejecutivo emitido en agosto del 2023 que excluyó a la empresa china Huawei como proveedora de redes 5G, por razones de seguridad nacional en Costa Rica.
El 6 de febrero de 2024, el Tribunal acogió la medida cautelar, lo que suspendió la vigencia del decreto y también paralizó una licitación del ICE en la que participaban ocho empresas, incluida la compañía china.
Al día siguiente, el 7 de febrero, el Instituto emitió un informe sobre las afectaciones al cronograma de la licitación 2023XE-000023-0000400001, producto de la medida cautelar. Este documento fue incluido en el expediente judicial 24-001014-1027-CA-4, al cual tuvo acceso La Nación.
La licitación de noviembre del 2023, buscaba proveedores para desarrollar la red de 5G, cuyo diseño e integración con los sistemas existentes del ICE requería plazos extensos hasta completarla.
Según el plan inicial, el lanzamiento comercial de los servicios estaba previsto para setiembre de este 2025, luego de una previsión inicial de concluir en junio de 2024, la adjudicación de un proveedor y, en diciembre del año pasado, la recepción de los equipos necesarios.
Sin embargo, fue hasta febrero de este año cuando el Tribunal Contencioso Administrativo y Civil de Hacienda declaró sin lugar la medida cautelar.
