Las instalaciones actuales del Hospital de Cartago no solo son insuficientes para la atención de los asegurados, sino que además la infraestructura de las diez áreas con mayor necesidad se encuentran en estado crítico.
Así lo definió Guillermo Mendieta Ramírez, director a. i. del Hospital Max Peralta de Cartago.
“La parte norte data de 1880, y todavía se mantiene con sus condiciones de infraestructura. La última construcción es de 1992. En este momento no cumple con los requerimientos de infraestructura que cumplen los códigos actuales. Desde 2003 se ha tenido que recurrir a alquiler de servicios para darle más campo a los servicios”, destacó.
Mendieta dio estas declaraciones este 18 de marzo, durante la sesión de la Junta de Adquisiciones de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) que busca readjudicar la construcción del nuevo centro médico.
“No podemos seguir ahí”, resumió.

Los 10 servicios con infraestructura crítica
Estas son las diez áreas que presentó Mendieta de un centro médico que, según proyecciones institucionales, este 2025 atiende a 595.145 asegurados.
1. Quimioterapia. La población con cáncer, según el director a. i., ha aumentado de forma exponencial. Como los pacientes no tenían las condiciones en el centro hospitalario, se alquiló un edificio que inicialmente cumplía los requerimientos, “pero ya no los cumple, porque la población ha ido creciendo”, dijo Mendieta.
“Muchos pacientes tienen que hacer fila en la parte de afuera y esto los expone a las temperaturas, ya sea de calor o frío o lluvia de Cartago. Ya no podemos más ahí”, expuso.
Se tiene el plan de mover el servicio donde en este momento está el archivo clínico de la clínica Jorge Volio, y buscar otro lugar para el archivo.
2. Hemodiálisis. Está en un tercer piso, en un área pequeña. La nefropatía (padecimientos en los riñones) ha ido aumentando con el tiempo y cada vez son más las personas que requieren el servicio. Instalaciones actuales presentan hacinamiento.
3. Maternidad y neonatología. Hay órdenes sanitarias por la poca cantidad de espacio y hacinamiento, pero no se tiene cómo ampliar el área.
4. Oftalmología. No hay área de espera. Los pacientes hacen fila y se agolpan en el pasillo. No tiene rampa para ley 7600 ni para salida de emergencias.
5. Salones de encamados. Datan de 1974. Los espacios son muy pequeños, solo están separados por una mesita de noche.
“Los pacientes están muy juntos, los ponemos en más riesgo de infecciones intrahospitalarias”, expresó Mendieta.
Los médicos no tienen oficina para analizar observaciones e incluir información en el EDUS, deben escribir notas en un pasillo. Esto reduce espacio para maniobrar en pasillos. No hay dónde colocar el equipo médico.
6. Salas de operaciones. Hay nueve. Solo hay un ingreso, tanto para quienes ingresan a cirugía como para y quienes salen a los salones de recuperación.
El aire acondicionado falla constantemente.
7. La sala de recuperación tiene espacio para solo 10 camas, “pero por la demanda, hay que estarlos moviendo constantemente”, dijo el director.
8. Emergencias. Los consultorios no cumplen con lo mínimo estipulado por el Ministerio de Salud. Para tener más espacios se tuvieron que quitar los servicios de Admisión y Farmacia y trasladarlos.
“Siguen pacientes en los pasillos porque no hay dónde colocarlos. La ocupación está al 200%”, señaló el médico.
9. Laboratorio clínico. Ante la falta de capacidad para resolver todo lo que les llega por no tener espacio, han tendido que solicitarse servicios a hospitales como Calderón Guardia y México.
10. Centro de detección temprana de cáncer gástrico. Han tenido que sacar áreas administrativas para darle la atención al cáncer a nivel nacional.
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16 órdenes sanitarias
Mendieta también recordó que el Max Peralta enfrenta 16 órdenes sanitarias emitidas por el Ministerio de Salud.
Seis fueron parcialmente atendidas en la Clínica del Dolor y Cuidados Paliativos, que está en instalaciones alquiladas y sus dueños subsanaron lo posible.
Hay otras 12 sobre el servicio de Emergencias. “Todas son por infraestructura, por falta de espacio para los pacientes y para tener lo requerido para ellos”, dijo el médico.
Las cuatro restantes son en Hemodiálisis.
Además, un informe de Bomberos de Costa Rica indica que no hay cumplimiento de medidas antiincendios.
El director recordó también otras fallas que no están en capacidad de subsanar:
- Deficiencias en la ventilación y control ambiental.
- Hacinamiento.
- Flujo quirúrgico ineficiente.
- Insuficientes áreas para almacenar y mantener equipo médico, insumos y medicamentos.
- Sanitarios insuficientes.
- Salas de espera no alcanzan, pacientes deben esperar de pie en pasillos.
- Consultorios. Son 51, pero no cumplen con los requerimientos. Son pequeños, calientes y no cumplen con ventilación
Arrendamientos son medida de emergencia, pero no cumplen
Recurrir a alquilar instalaciones ha sido una medida de emergencia ante la situación actual, pero se enfrentan con tres problemas. El primero es que en los alrededores del Max Peralta no hay infraestructuras que cumplan con requerimientos del Ministerio de Salud.
El segundo es la Ley de Contratación Administrativa, que pone trabas. Mendieta explicó que, por la ubicación, las oficinas aledañas son consultorios médicos privados, y es normal que sus dueños sean funcionarios de la CCSS o familiares de estos, esto imposibilita el alquiler de varias instalaciones y los obliga a alquilar más lejos del hospital, con todas las complicaciones que pueda traer.
Finalmente, el tercero son los costos que implican los arrendamientos. La erogación es de ¢263.993.784,10 por año.
