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El presidente Nayib Bukele en las afueras de la Asamblea Legislativa, el 9 de febrero del 2020, cuando acudió con policías y soldados al recinto legislativo en San Salvador. AP/Archivo (Salvador Melendez/AP)
Washington. Un senador estadounidense de alto rango pidió el viernes al gobierno de Donald Trump prestar atención a El Salvador, al denunciar el “preocupante” rumbo del país centroamericano bajo el mandato del presidente Nayib Bukele.
“Dados los acontecimientos en El Salvador, es hora de que Estados Unidos revise su enfoque y priorice las políticas diseñadas para reforzar el Estado de derecho”, dijo Bob Menéndez, principal representante de los demócratas en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
En una carta dirigida al jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, Menéndez instó a la administración Trump a poner fin a su "silencio irresponsable" sobre lo que consideró "un debilitamiento de la gobernabilidad democrática" en El Salvador desde febrero, cuando Bukele apeló a personal militar armado para ocupar la Asamblea Legislativa.
El veterano senador de Nueva Jersey mencionó presuntas irregularidades con contratos para responder a la pandemia de covid-19, así como reportes de negociaciones secretas con la violenta Mara Salvatrucha (MS-13) para acordar mejores condiciones carcelarias a cambio de apoyo al partido de Bukele en las elecciones legislativas de febrero del 2021.
En El Salvador, las pandillas tienen unos 70.000 miembros, más de 17.000 de ellos encarcelados, y se dedican a la extorsión y el narcotráfico, entre otras actividades ilegales.
Menéndez cuestionó que, ante estos hechos, el gobierno de Trump haya continuado elogiando a Bukele, e instó a Pompeo a apoyar a la oficina del fiscal general, Raúl Melara, cuestionado por Bukele, así como a la sociedad civil y los medios de comunicación independientes salvadoreños, “controles esenciales del poder del gobierno en cualquier democracia”.
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Bob Menéndez (foto), senador demócrata, expresó su disgusto por el comportamiento del presidente salvadoreño, Nayib Bukele. AP/Archivo (Seth Wenig)
El mandatario atacó a Melara por iniciar una investigación sobre los gastos estatales para la atención de la crisis por el coronavirus y lo acusó de estar en “campaña” electoral a favor de la derecha.
“El silencio continuo no es una opción aceptable”, manifestó.
Llamadas de atención
No obstante, en setiembre, Bukele, recibió advertencias del gobierno de Estados Unidos y de congresistas que expresaron su preocupación sobre “la creciente hostilidad” hacia la prensa después de que el diario digital El Faro denunció una presunta negociación entre el gobierno y las pandillas.
“Los periodistas realizan un trabajo crucial en una democracia y su independencia debe ser respetada”, destacó entonces el jefe de la diplomacia estadounidense para América Latina, Michael Kozak.
En abril, la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos humanos, Michelle Bachelet, expuso su “seria preocupación” porque el Estado de derecho y el orden constitucional eran socavados a medida que las autoridades implementaban medidas para combatir la propagación de la covid-19.