
Los Angeles, California. Paramount encendió este lunes una nueva disputa corporativa en Hollywood al anunciar en un comunicado de prensa una oferta pública en efectivo para adquirir la totalidad de Warner Bros. Discovery (WBD), apenas tres días después de que la empresa Netflix Inc. informara su acuerdo definitivo para comprar ese mismo conglomerado por $82.700 millones.
El anuncio este 8 de diciembre sobrevino en un escenario ya turbulento. Según reportaron Reuters y CNBC, varios congresistas estadounidenses calificaron el viernes el acuerdo entre Netflix y WBD como una “pesadilla antimonopolio” que podría perjudicar a consumidores y creadores.
Mientras Netflix defiende la compra alegando que generará más empleos y ofrecerá “más valor por su dinero” a sus 300 millones de suscriptores, en paralelo crece la presión política por el tamaño de la operación y su eventual impacto en precios y competencia.
Es en ese contexto que hoy Paramount subió el monto en la puja.
La nueva propuesta de Paramount, valorada en $30 por acción en efectivo, eleva a un monto de $108.400 millones la eventual transacción, cifra superior en $18.000 millones la ofrecida por Netflix.
La firma enfatizó que su planteamiento supuestamente elimina la estructura mixta de acciones y efectivo propuesta por su competidor y garantizaría un cierre “más rápido y seguro” desde la perspectiva regulatoria.
David Ellison, presidente y director ejecutivo de Paramount, afirmó que los accionistas de WBD “merecen considerar una oferta superior por la totalidad de la compañía” y criticó que la junta directiva de WBD recomendara el acuerdo con Netflix sin evaluar a fondo cada una de las seis propuestas previas de Paramount.
“Creemos que la junta de WBD está impulsando una propuesta inferior que expone a los accionistas a riesgos regulatorios y a un incierto valor futuro”, expresó Ellison cuya familia ha estado asociada a nivel partidario con el presidente Donald Trump.

Riesgos regulatorios
En su comunicado de prensa, Paramount afirma que su operación incrementaría la competencia al unir Paramount+ con HBO Max, en contraste con la fusión Netflix–WBD, que, según la empresa, dejaría a Netflix con 43% del mercado global de suscripciones de video bajo demanda (SVOD), un nivel que podría desatar objeciones en distintas jurisdicciones.
Medios estadounidenses señalaron que funcionarios en Europa y congresistas en Washington ya expresaron inquietudes sobre el poder que ganaría Netflix al combinarse con el estudio centenario de Warner Bros. y con la plataforma HBO Max.
Netflix, por su parte, argumenta que la operación estimularía la industria y permitiría agregar contenido mientras la administración del presidente Donald Trump mantiene como prioridad la reducción de precios al consumidor.
Paramount, por su parte, insistió en que su integración con WBD reforzaría la inversión en contenido y ampliaría la oferta de estrenos cinematográficos.
Entre las sinergias que plantean destacan un ahorro de más de $6.000 millones y una cartera ampliada de derechos deportivos globales, incluida la transmisión de la Champions League del futbol europeo.
Además, la empresa reiteró que mantendría los estudios de ambas compañías y apostaría por ampliar la producción para streaming y distribución a terceros.
Mientras todo esto ocurre, WBD aún no responde públicamente a la nueva propuesta.
Su junta directiva no ha convocado votación sobre el acuerdo con Netflix, el cual incluye la separación previa del segmento Global Networks para dar origen a Discovery Global en 2026.
