
Washington, Estados Unidos. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes que comenzó a organizar una cumbre de paz entre el líder ucraniano, Volodimir Zelenski, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, tras una jornada de encuentros en la Casa Blanca.
Trump afirmó que había hablado por teléfono con Putin, con quien se reunió en Alaska la semana pasada, tras una “muy buena” reunión con el presidente ucraniano y varios líderes europeos.
“Al concluir las reuniones, llamé al presidente Putin e inicié los preparativos para una reunión, en un lugar por determinar, entre el presidente Putin y el presidente Zelenski”, escribió Trump en su plataforma Truth Social.
El presidente estadounidense, de 79 años, añadió que, después de esa reunión, celebrará un encuentro trilateral con ambos líderes.
“Todo el mundo está muy contento con la posibilidad de PAZ para Rusia/Ucrania”, escribió Trump.
El canciller alemán, Friedrich Merz, indicó poco después en la Casa Blanca que Putin había aceptado entrevistarse con Zelenski “en las dos próximas semanas”.
Trump también afirmó que había abordado las garantías de seguridad para Ucrania como parte de un acuerdo de paz con Rusia.
Según publicó en Truth Social, varios países europeos serán los encargados de brindar esas garantías, mientras que Estados Unidos tendrá un papel de coordinador.
Poco antes, el mandatario estadounidense indicó que Putin había aceptado dichas medidas.
El presidente ucraniano Volodimir Zelenski se declaró dispuesto a reunirse con el mandatario ruso, Vladimir Putin, para poner fin a la guerra desatada tras la invasión a Ucrania hace tres años y medio.
“Confirmé, y todos los líderes europeos me apoyaron, que estamos listos para una reunión bilateral con Putin”, declaró Zelenski a medios ucranianos a las afueras de la Casa Blanca tras reunirse con el presidente estadounidense, Donald Trump, junto a varios líderes europeos.
El presidente finlandés Alexander Stubb, sin embargo, consideró que el gobernante ruso Vladimir Putin no es una persona de fiar, en declaraciones a la salida de la reunión en la Casa Blanca.
“Rara vez Putin es alguien digno de confianza. Habrá que ver entonces si tiene la valentía de asistir a una reunión trilateral o si, una vez más, trata de ganar tiempo”, dijo Stubb a la prensa finlandesa.
Optimismo
La Casa Blanca fue el escenario de una reunión extraordinaria —y significativa— en la que se dieron cita Trump, Zelenski y los líderes de Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, Finlandia, la Comisión Europea y la OTAN.

El líder ucraniano también se reunió en privado con Trump en el Despacho Oval.
Zelenski consideró que esta reunión había sido la “mejor” hasta la fecha con el presidente estadounidense.
El ambiente del encuentro entre ambos líderes fue mucho más relajado que en febrero, cuando Trump y su vicepresidente, JD Vance, reprendieron públicamente al ucraniano por no mostrarse “agradecido” por el apoyo estadounidense.
Esta vez, Trump incluso elogió a Zelenski por su chaqueta negra, después de que medios de comunicación conservadores criticaran al ucraniano por no vestir un traje durante su anterior visita.
“¡No lo puedo creer, me encanta!”, exclamó Trump, al admirar el elegante traje y camisa negra del líder ucraniano a su llegada a la Casa Blanca.
“Es lo mejor que tenía”, bromeó Zelenski, un excomediante de televisión antes de convertirse en presidente.
Zelenski también aprovechó el encuentro para entregarle a Trump una carta de parte de su esposa Olena para Melania Trump, agradeciendo a la primera dama estadounidense por escribirle a Putin instándolo a salvar las vidas de los niños.
Que el atuendo de Zelenski sea un tema puede resultar extraño para algunos en medio de una guerra. Pero también subraya hasta qué punto los líderes extranjeros han tenido que cortejar a un presidente estadounidense notoriamente caprichoso.
El anfitrión se mostró optimista sobre las posibilidades de poner fin a la invasión rusa.
“En una o dos semanas sabremos si vamos a resolver esto o si esta horrible lucha va a continuar”, dijo Trump al iniciar la reunión.
La presencia de los líderes europeos y la OTAN puso de relieve, sin embargo, el nerviosismo sobre la postura de Washington respecto a Ucrania.

“Intercambio de territorios”
Antes de la cita de este lunes, Trump presionó a Ucrania para que renunciara a Crimea y abandonara su objetivo de unirse a la OTAN, dos exigencias clave de Putin.
El estadounidense añadió que, durante las reuniones de este lunes, los participantes necesitaban “abordar los posibles intercambios de territorio” entre Rusia y Ucrania.
Según medios de comunicación, Putin presiona a Ucrania para que ceda su región oriental del Donbás, de la que Kiev sigue controlando gran parte, a cambio de congelar el frente en otras zonas.
Ucrania rechaza cualquier medida de este tipo y este lunes recibió el apoyo del canciller Merz.
“El pedido de Rusia a Kiev para que le ceda las zonas libres del Donbás es equivalente, para decirlo sin rodeos, a que Estado Unidos tenga que entregar Florida”, declaró el líder alemán a la prensa en la Casa Blanca.
La cuestión del cese del fuego
Durante su encuentro con Trump, los europeos agradecieron al mandatario estadounidense y pidieron una paz duradera para poner fin a la invasión rusa.
“Estoy muy emocionado. Aprovechemos al máximo el día de hoy”, dijo el secretario general de la OTAN, Mark Rutte.
El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió, sin embargo, una reunión a cuatro bandas, que incluya a los europeos, para abordar un conflicto devastador en su continente.
Además, solicitó intensificar las sanciones contra Rusia si el presidente Vladimir Putin no avanza en la paz con Ucrania, tras las conversaciones en la Casa Blanca.
A la pregunta sobre si Trump había dicho que las concesiones territoriales de Kiev eran necesarias antes de cualquier garantía de seguridad por parte de Estados Unidos a Ucrania, Macron respondió: “No, eso no se discutió en absoluto. Estamos muy lejos de eso”.
Merz rechazó por su parte la propuesta de Trump de buscar un acuerdo de paz sin pasar por un cese inmediato de las hostilidades.
“No puedo imaginar que la próxima reunión ocurra sin un alto al fuego, así que trabajemos en eso y tratemos de ejercer presión sobre Rusia”, afirmó Merz.
La cumbre entre Trump y Putin en Alaska no trajo un cese el fuego para una guerra que dura ya casi tres años y medio y que comenzó en febrero de 2022, con una invasión a gran escala por parte de Rusia.
Ataques rusos durante la noche pasada causaron la muerte de al menos siete personas en Ucrania, entre ellas dos niños.
