El flete marítimo se convirtió en la opción de los exportadores para enviar mercancías desde Costa Rica hacia Panamá, ante la suspensión indefinida del transporte de carga por la vía terrestre desde el puesto fronterizo Paso Canoas, debido a las protestas en el país vecino. Esta opción ha provocado un aumento del 27% en los costos, según indican dirigentes del sector.
Mientras el costo del flete vía terrestre se estima en $2.120, por vía marítima se calcula en $2.700, equivalente a 27% de incremento, refirió Víctor Pérez Pérez, presidente de la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco).
Al respecto, la Cámara Costarricense de Navieros (NAVE), respondió que cada empresa asociada maneja sus propios procedimientos comerciales y además que no todas ofrecen el servicio de transporte marítimo hacia Panamá, indicó Alfredo Salas, director ejecutivo de la gremial.
La Nación confirmó con algunas navieras el reciente aumento de la demanda de los servicios de transporte hacia Panamá. La empresa DHL calcula un incremento entre el 25% y 30% de los volúmenes por la modalidad marítima y espera que siga avanzando en las próximas semanas si la situación persiste.
El incremento se aplica tanto para las exportaciones como para las importaciones, como alternativas logísticas para trasladar los productos y materias primas desde y hacia Panamá, indicó Óscar Ayala, director de carga marítima de DHL para Centroamérica y el Caribe.
La misma tendencia es confirmada por la empresa Seaboard Marine. Helmut Dorsam, gerente general, confirmó que la demanda creció. Prefirió no detallar el porcentaje de aumento por considerar que no era lógico calcularlo debido a que están partiendo de una base prácticamente nula hacia ese destino.
Dorsam señaló que la tarifa por contenedor es de alrededor de $2.600 puerta a puerta, es decir, incluyendo los fletes internos en ambos países desde el área metropolitana de Costa Rica hasta Ciudad de Panamá.
El cobro por contenedor depende del tamaño (20 o 40 pies), con pesos promedios de 21 a 23 toneladas, explicó por su parte Ayala, de DHL.
José Antonio Salas, presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Costa Rica (Crecex), indicó que algunos asociados han decidido no importar ni exportar hasta que se solucionen los problemas en Panamá, como medida preventiva ante posibles pérdida mayores.
Hasta el momento, el Ministerio de Comercio Exterior (Comex), continúa evaluando las afectaciones económicas con los gremios implicados, indicó el jerarca de la entidad, Manuel Tovar.
Las protestas en Panamá se iniciaron luego de que la Asamblea Legislativa aprobó, el 20 de octubre pasado, una moratoria por tiempo indefinido de la minería metálica, la que posteriormente fue promulgada por el Poder Ejecutivo.
Transporte de carga terrestre afectado
La otra cara de la moneda son las afectaciones que enfrenta el transporte de carga terrestre. El sector contabiliza al menos 700 camiones varados, de todas las nacionalidades del istmo, que continúan detenidos a causa de las protestas.
Marjorie Lizano, vicepresidenta de la Cámara Costarricense de Transportistas Unitarios (CCTU), indicó que el 6 de noviembre remitieron una carta al canciller Arnoldo André solicitando que agilice las gestiones para buscar una pronta solución a esta problemática. Explicó que los transportistas buscan garantizar su estadía en lugares seguros.
La Cámara Nacional de Transportes de Carga (Canatrac) no está transitando hacia Panamá por razones de seguridad. Este destino representa el 15% del flujo de transporte que opera en la región, señaló Francisco Quirós Tencio, vicepresidente ejecutivo de esta organización.
De acuerdo con la información que recopila Cadexco, son 36 camiones de carga que se mantienen varados en el puesto fronterizo Paso Canoas.
Exportadores panameños revelan impacto
Del otro lado de la frontera, también hay reclamo de los exportadores. Víctor M. Pérez, presidente de la Asociación Panameña de Exportadores (APEX), señaló a La Nación que la mayoría de los rubros de exportación tienen afectaciones “medias y altas” por el impacto acumulado de los cierres de carreteras.
Para el dirigente gremial panameño, de mantenerse las protestas la próxima semana, las pérdidas de ingresos diarias se calculan en $1 millón. APEX aglutina a 120 empresas que representan el 95% de las exportaciones totales del país, explicó.
Pérez mencionó que los rubros más afectados por la suspensión del flujo comercial entre Panamá y Costa Rica son productos alimenticios diversos y envases fabricados en zonas francas, que tienen como destino final Costa Rica y, en otros casos, transitan hacia los demás países de Centroamérica.
En la otra dirección, desde Costa Rica a Panamá, dijo que los rubros perjudicados son productos alimenticios enlatados, envases y snacks.
Consideró que la vía aérea es una opción pero muy costosa y con capacidad limitada para productos de consumo masivo. Indicó que por vía terrestre, el costo de traslado de carga desde Chiriquí a Ciudad de Panamá oscila entre $0,03 y $0,05 por libra, mientras que por vía aérea es de $0,40 a $0,50 por libra.
Pérez señaló que en este momento la expectativa está puesta en el diálogo entre los representantes del gobierno panameño y los líderes de los manifestantes para lograr la apertura de las vías, apelando a la crisis humanitaria que los cierres están causando, principalmente en las zonas de Chiriquí y Boca del Toro.
Este viernes, el Gobierno panameño confirmó la importación de gasolina regular y diésel desde Costa Rica para abastecer la provincia de Chiriquí, como medida temporal por el cierre de las vías terrestres.