
La administradora Larah Danielly Oliveira, de 36 años y residente en Anápolis, Brasil, vivió una experiencia inusual tras utilizar un dispositivo intrauterino (DIU).
Luego de colocarse el anticonceptivo en 2020, tras el parto de su segundo hijo, descubrió meses más tarde que estaba embarazada por tercera vez.
Los médicos no lograron detectar el dispositivo durante los ultrasonidos posteriores y concluyeron que ella lo había expulsado sin notarlo.
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Durante el embarazo, Larah se sometió a más de ocho ultrasonidos. En ninguno de ellos apareció el dispositivo. El parto se desarrolló sin complicaciones. Tampoco se halló el DIU en ese momento. Los especialistas aseguraron que lo había perdido.
Sin embargo, tres años después, un examen de rayos X solicitado por motivos ortopédicos reveló un hallazgo inesperado: el DIU seguía dentro de su cuerpo.
Estaba acompañado por otro dispositivo, ya que Larah se colocó un segundo DIU luego del tercer parto. Tras estudios adicionales, los médicos confirmaron que el primero de ellos se había desplazado y se encontraba junto al intestino.
El procedimiento para extraerlo fue más complejo de lo previsto. Al examinar con una cámara, los médicos descubrieron que la parte de cobre del dispositivo había perforado el intestino. La cirugía, que se estimaba de 30 minutos, se extendió por cinco horas.
Se requirió cortar una sección del intestino, grapar el tejido y colocar un dreno para el monitoreo postoperatorio. Larah tuvo que seguir un estricto régimen de reposo y alimentación.
Después de la intervención, decidió compartir su historia en redes sociales con el objetivo de advertir a otras mujeres sobre este riesgo poco común.
Indicó que nunca había escuchado sobre la posibilidad de que un DIU migrara a otros órganos y mencionó que representa uno de los casos que integran el reducido porcentaje de personas que experimentan este tipo de complicación.
Larah continúa con el segundo DIU, aunque expresó que planea retirarlo pronto por falta de confianza. Actualmente es madre de tres niños de 7, 5 y 3 años.
¿Es seguro usar un DIU?
El ginecólogo Alexandre Pupo Nogueira, miembro de la Federación Brasileña de Asociaciones de Ginecología y Obstetricia, explicó que el término DIU se refiere a diversos modelos de dispositivos intrauterinos. El más conocido es el DIU de cobre, que actúa como barrera para evitar la fecundación. Este metal, al interactuar con secreciones uterinas, libera sustancias que eliminan los espermatozoides.
Pupo señaló que el DIU de cobre presenta una eficacia inferior a la ligadura de trompas y no ofrece protección contra bacterias. Por esa razón, el riesgo de infecciones es mayor. En cambio, el DIU de cobre con plata incorpora una acción bactericida, lo que reduce esa posibilidad. También existen modelos hormonales, los cuales liberan progesterona que dificulta el ascenso bacteriano.
¿Puede el DIU moverse de lugar?
Según el especialista, en los casos de DIU de cobre o cobre con plata, el riesgo de desplazamiento ronda el 1 %. Si eso ocurre, el método pierde su función anticonceptiva. Para los DIU hormonales, la posibilidad de desajuste es del 0,5 %, pero en esos casos el efecto no desaparece por completo.
El ginecólogo explicó que el procedimiento se realiza sin visión directa, por lo que un posicionamiento incorrecto podría generar complicaciones. Si se coloca de forma superficial, puede causar sangrados o cólicos, lo que facilita la expulsión natural del dispositivo.
Si se introduce con demasiada profundidad, puede perforar el útero y migrar hacia otros órganos, como ocurrió en el caso de Larah. Aunque no se trata de una situación frecuente, sí representa una posible complicación.
¿Cómo verificar que el DIU está bien posicionado?
El médico recomendó realizar una ultrasonografía transvaginal para confirmar la colocación correcta. Antes de insertar el dispositivo, se debe evaluar la posición y las dimensiones del útero.
Un mes después de la colocación, se debe repetir el examen. A partir de ahí, algunos especialistas recomiendan controles cada seis meses, mientras que otros prefieren revisiones anuales.
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*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
