El rock no debe tener ataduras. Al menos así reflexiona Panchito Villa, el guitarrista de la banda argentina Isla de Caras antes de su concierto en Costa Rica, el cual se efectuara el próximo 18 de febrero en Casa Rojas, en barrio Escalante.
En el efervescente escenario musical latinoamericano, donde muchas bandas emergentes buscan internacionalizarse, esta agrupación ha captado la atención gracias a su enfoque innovador, desafiando ciertos convencionalismos del género.
Con una amalgama de suaves guitarras, texturas atmosféricas, sintetizadores envolventes y sutiles influencias lo-fi, la banda ha logrado crear un sonido distintivo que se aparta de los patrones roqueros convencionales.
“La escena es muy competitiva, la barra está muy alta y es necesario saber diferenciarse. Nosotros creemos en ofrecer música que toque el corazón, que permita bailar o simplemente disfrutar al escucharla cómodamente en un sillón. Nada de poses”, explica el músico, quien vendrá con su banda al país para promocionar el disco Gran Turismo.
Isla de Caras quiere todo
En conversación con Viva, Panchito Villa, guitarrista originario de Argentina, comparte sus reflexiones acerca de la presión que experimentan los músicos en el ámbito del rock en su país natal.
Villa señala que el legado de icónicos músicos argentinos como Gustavo Cerati y Charly García ha generado expectativas significativas para aquellos que se autodenominan “roqueros”.
“En Argentina, la historia del rock es rica y diversa, con artistas que han dejado un legado imponente. Queremos estar a la altura de esos estándares, pero también buscamos encontrar nuestra propia identidad”, explica Villa.
El guitarrista destaca que, en la búsqueda de reconocimiento internacional, muchas bandas locales aspiran a seguir los pasos de aquellos que han logrado trascender fronteras. Hizo especial mención al auge de Bandalos Chinos, en 2016, una banda que catapultó su carrera a nivel internacional, convirtiéndose en referente del rock alternativo latino.
Después del éxito de esa agrupación, ha surgido una ola de nuevas bandas que buscan aprovechar la atención que el mercado argentino ha tenido. “Es crucial entender que no se trata solo de replicar fórmulas exitosas; es necesario hacer música honesta y conectar con el público latino de manera auténtica”, enfatiza Villa.
En la perspectiva de la banda, hay dos componentes clave que, según el músico, definen su sonido y enfoque distintivo.
En primer lugar, la banda pone un énfasis especial en las letras, especialmente en torno al amor y desamor. Sin embargo, abordan estos temas con un toque de ironía y cierta comicidad en la voz del narrador de las canciones.
“Es como un patetismo que hay en quien canta. Quien canta es como un personaje al que todo le sale mal en el amor y creo que hace que la gente empatice con él”, dice entre risas el músico.
Por otro lado, el guitarrista destaca que, a diferencia de muchas bandas que buscan destacar a través de extensos solos de guitarra, en Isla de Caras la atención se centra en las texturas y matices de la música.
“No estamos buscando grandes solos para que yo me luzca como guitarrista. Nuestro enfoque está en los detalles, en los matices y tonos que fusionan una sonoridad sensible y distintiva. La música se trata de texturas”, añade.
Villa, finalmente, destaca la importancia de crear una experiencia musical completa, donde la combinación de letras profundas y la expresividad musical se entrelacen de manera adecuada en los conciertos.
El guitarrista comparte que, como espectador de conciertos, se llena de una energía “bonita” cuando ve a un músico disfrutando lo que hace la banda en conjunto y no en solitario. Villa busca incorporar ese referente en la forma en que ellos se presentan en vivo.
“Para nosotros, la música es una narrativa completa. Cada elemento, desde la letra hasta los matices musicales, contribuye a construir una experiencia emocional y auténtica para nuestro público. Ya queremos dar nuestro concierto para demostrarlo”, concluye.
Los detalles del show
El concierto de Isla de Caras en Costa Rica tendrá lugar el domingo 18 de febrero.
La fase inicial de boletos se agotó rápidamente; la segunda fase, ahora disponible por $25 más cargos, puede adquirirse en el sitio web Starticket.cr.
El evento es presentado por la productora Cream Latam Agency y Casa Rojas.