¿Cómo se terminará el mundo? Los del grupo nacional Maldito Delorean no saben, pero se imaginan que seguro pasará de golpe. “Me imagino el apocalipsis como algo bastante movido y la música refleja eso”, señaló Luis Machado, hablando del nuevo disco de su grupo.
Contemplando la extinción es el cuarto álbum de Maldito Delorean, una banda de rock psicodélico que poco a poco ha traído sus composiciones hasta el futuro, o más bien, nuestro presente.
Su nuevo disco será presentado este viernes 21 de febrero en Cantina SCCA, en San José, la misma ciudad que inspiró muchas de sus composiciones.
“Hemos vivido situaciones personales muy fuertes y hay mucho caos y miedo en el mundo, basta con ver la noticias. Quisimos mezclar ese ambiente apocalíptico con un poco de la vida en San José, como la vemos nosotros con nuestros ojos”, señaló Machado.
La alineación del grupo la completan Karol Barboza y David Mora, siendo los tres responsables de cantar, componer y grabar las 12 canciones del disco, que se puede escuchar y comprar en Bandcamp y el último día del mes estará en Spotify.
El título Contemplando la extinción responde al orden apocalíptico que inspiró al grupo.
“Queremos que el título del disco despierte algo, porque no estamos solo contemplando lo que pasa, creo que somos partícipes. Lo que me gusta de la música es que pueden hacerse preguntas y no exactamente forzar a alguien a pensar algo”, explicó Machado.
En dos años, Maldito Delorean ha publicado tres álbumes y cuatro discos cortos, todos grabados por ellos mismos y con la colaboración del tico Frank Noguera. Los cuarto conforman Maldito Estudio, una iniciativa que graba y también trata de difundir música nacional en su canal de YouTube.
Maldito Estudio organizó para este viernes 21 de febrero a las 8 p.m. el Maldito Fest, en el que celebrarán la salida del nuevo disco bailando y compartiendo con otras bandas nuevas como Neliero, Señorita Abril, Doña Pacha y Loli Fuji.
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“Queríamos reunir a bandas con las que tuviéramos cosas en común, pero que propusieran algo diferente”, comentó Machado. “Estos son grupos que admiramos, porque si no fuera por toda esta gente que se manda a hacer lo que puede con lo que tiene, no escucharíamos nada nuevo”.
La entrada al Maldito Fest costará ¢4.000. En el lugar se podrá comprar mercadería de todas las bandas, así como la versión física de Contemplando la extinción.
Bailar en el fin del mundo
En las letras de Maldito Delorean hay un sentimiento de abandono de las fuerzas mayores, de la sociedad o de algún interés amoroso, pero la música no propone tanto llanto como baile.
Así se puede oír en Cero, la acelerada canción que abre el disco. “Cero es el momento antes del apocalipsis, bien movido”, comentó Luis Machado.
“Todas las canciones de alguna forma se relacionan con ese apocalipsis, aunque no necesariamente a ese momento en que se va a terminar el mundo, sino un sentimiento de furia que uno siente pero que no se puede esconder”, explicó.
El grupo cree que cada canción es una fotografía del momento en que se grabó, pero también de sus vidas: aparte de dolores en las letras hay desahogos juveniles: desde ir al parque juntos, sentarse alrededor de una Botella de ron hasta inflingirse heridas.
Estas escenas no son sugerencias, sino momento de la juventud que dan para contar historias después.
“Lo que canto no es lo que paso solo yo, sino lo que pasamos todos o solo alguno", asegura Luis, y cuando se le escucha cantar, se le puede dar la razón.