
El actor alemán Udo Kier, considerado una figura de culto en el cine y conocido por su mirada penetrante, su versatilidad y su irreverencia artística, falleció a los 81 años este domingo, según informó su pareja, el artista Delbert McBride en declaraciones a la revista estadounidense Variety.
Kier, cuyo nombre real era Udo Kierspe, nació el 14 de octubre de 1944 en Colonia, Alemania.
Durante más de seis décadas de carrera, participó en más de 200 películas, abarcando géneros que van desde el horror y lo subversivo hasta el cine de autor y el comercial.
Fue colaborador habitual de cineastas de renombre, incluyendo Andy Warhol, Paul Morrissey, Lars von Trier, Werner Herzog, Gus Van Sant y Dario Argento, entre otros.
Su salto a la fama se dio con trabajos icónicos junto a Warhol: protagonizó Flesh for Frankenstein (1973) y Blood for Dracula (1974), ambas películas dirigidas por Morrissey y producidas por Warhol. En estas cintas, Kier aportó una mezcla de horror, erotismo y humor, reinventando los monstruos clásicos con un giro subversivo.
Además de su cine más alternativo, Kier dejó huella en grandes producciones de Hollywood. Participó en películas como My Own Private Idaho, Ace Ventura: Detective de mascotas, Blade y Armageddon.
Legado
Reconocido por sus ojos azules intensos y su voz inconfundible, Kier abrazó papeles excéntricos, a menudo villanos o personajes oscuros, con una elegancia casi teatral.
Era abiertamente gay y vivió varios años en Palm Springs, California, donde residía junto a su pareja, Delbert McBride.
Sus colaboraciones con Warhol marcaron un hito, mientras que su trabajo con cineastas contemporáneos lo mantuvo vigente hasta sus últimos años.
No solo por la cantidad de películas que protagonizó, sino por la forma en que se convirtió en icono del cine alternativo, del horror bizarro y del extravagante.
