El músico estadounidense Little Richard, uno de los pioneros del rock and roll, conocido por canciones universales como Tutti Frutti o Long Tall Sally y por su electrizante presencia en el escenario, murió el sábado a los 87 años, anunció su único hijo a la revista Rolling Stone.

El cáncer fue la causa de la muerte de esta leyenda de la música que movilizó a multitudes desde los años 1950.

El músico Kelvin Holly lamentó el deceso a través de las redes sociales: “Descansa en paz, Richard. Mis pensamientos y oraciones están con todos mis compañeros de banda y fanáticos de todo el mundo. ¡Richard realmente era el rey!”, escribió el músico, quien trabajó como guitarrista junto a Little Richard.

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Es sabido que el cantante arrastraba problemas de cadera y del corazón; además, había sufrido un derrame cerebral hace unos años. Richard nació en Georgia el 5 de diciembre de 1932.

Tuvo 11 hermanos y viene de una familia de predicadores. Cantó en una iglesia, sin embargo, nunca recibió el apoyo de su papá Bud, quien acusaba a su hijo de ser homosexual. Richard se fue de su casa con 13 años y una familia blanca le acogió, contó a Rolling Stone en los 70.

Richard Penniman, como fue bautizado, empezó en el mundo de la música en los años 40, siendo muy joven. No fue hasta mediados de los 50 cuando empezó a tener éxito musical.

Con su música puso a bailar a jóvenes en todas partes del mundo.

Según el medio La Vanguardia, fue junto a Specialty Records que Richard sacó una seguidilla de sencillos “de lo más salvajes y extravagantes que se habían escuchado hasta el momento, en plena era del rock and roll”.

Entre esos temas destacaron Keep A-Knockin, Rip It Up y Lucille.

El artista también es recordado por sus osadas letras, en muchas de ellas aparecen originalmente mensajes sexuales y de doble sentido; incluso, como en el caso de la reconocida pieza Tutti Frutti (1956), se le solicitó “limpiarla” pues su primera versión hacía referencia explícita al sexo anal.

"Creo que mi legado debe ser exactamente ese, cuando empecé en el show business no existía nada parecido al rock and roll. Cuando lancé Tutti Frutti es cuando el rock empezó a golpear”, dijo hace siete años en entrevista con la revista Rolling Stone, cuando anunció que se retiraba a los 80 años.

Sus palabras llegaron tiempos después de presentarse en el Howard Theatre de Washington, donde emitió una frase que impresionó a su público: “Jesús, ayúdame. Casi ni puedo respirar, es horrible”.

Antes de bajarse del escenario la estrella se presentaba en silla de ruedas. Fue incansable, pero cuando dijo que detenía su carrera, confesó que se sentía “acabado y sin ganas de hacer nada más”.

Grito de guerra

Little Richard es considerado uno de los padres del rock and roll junto a Chuck Berry (ya fallecido) y Jerry Lee Lewis. Richard llegó a revelar que siempre se sintió menospreciado por ser una persona negra y que creía que Lee Lewis se llevó gran parte de la fama que le correspondía, recuerda el diario El País.

Su música allanó el camino a artistas como Elvis Presley y los inolvidables The Beatles y los Rolling Stones, quienes versionaron varias de sus canciones.

Su extravagancia le acompañó siempre. Sus grandes copetes, maquillaje andrógino y su personalidad provocadora le hicieron único. También muchas veces se escudriñaron sus preferencias sexuales. Nunca se declaró gay, pero en una ocasión dijo que se sentía atraído tanto por hombres como por mujeres. No obstante, en 2017 aseveró que Dios había creado hombres, hombres y mujeres, mujeres y que había que vivir “como Dios quería que vivieras.”

El cantante Prince fue muy influenciado por el estilo de Little Richard, así como Elton John.

“Prince es el pequeño Richard de su generación. ¡Estaba usando morado antes de que lo usaras!”, le dijo Richard a Joan Rivers en 1989, recuerda la revista Rolling Stone.

El clásico grito de este “animal escénico” era el A-wop-bop-a-loo-bop-a-wop-bam-boom. Con la misma fuerza con la que cantaba y alzaba la voz, también siempre habló con la verdad, como cuando dijo que el género del rock and roll se debía a que “los blancos se lo habían arrabatado a los negros”.

“Fuimos nosotros, la gente negra, los que creamos el rock and roll. Elvis era increíble, pero él no fue un creador. No quiero decir con eso que fuera peor, pero los auténticos creadores del rock and roll fueron negros. Ahora está pasando lo mismo con Eminem y el rap, que es otro estilo creado también por los negros”, aseveró en 2005, replica el diario español El País.

En la gran pantalla y en la iglesia

La estrella de RIchard también llegó hasta él cine. Él y algunos de sus contemporáneos aparecieron en las primeras películas de rock and roll como Don’t Knock the Rock (1956) y The Girl Can’t Help It (1957).

En 1957, Little RIchard se separó de la música y entró a la escuela bíblica Alabama Oakwood College. En 1959 se ordenó como ministro, rememora Rolling Stone. Luego sacó un álbum de música Gospel y para 1964 regresó al rock secular.

Su vida estuvo llena de reconocimientos. En 1986, fue uno de los 10 participantes originales en el Salón de la Fama del Rock and Roll, y en 1993 fue galardonado con el Lifetime Achievement Award en los Grammys, cita la revista americana.

Durante sus últimos años musicales Little Richard tocó siempre sentado en su piano. En 2009 le hicieron una cirugía de reemplazo de cadera. Aun en esas circunstancias su espíritu alegre siempre le acompañó.