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Emma Stone conquistó su segundo premio Óscar a mejor actriz en el 2024, gracias a su memorable actuación en la cinta Pobres criaturas, dirigida por Yorgos Lanthimos. Con este exitoso precedente, la británica vuelve a la gran pantalla de la mano del mismo cineasta en Tipos de gentileza.
La película, fiel al estilo disruptivo del realizador griego, es un tríptico: es decir, narra tres historias paralelas. En este largometraje, tanto Stone como el resto de actores principales, interpretan tres papeles diferentes; uno por cada línea narrativa.
“Empezamos con una historia sola, pero a medida que la íbamos trabajando, pensamos que sería interesante hacer una película con una estructura diferente a las que habíamos hecho antes. Cuando identificamos las historias subsiguientes, quisimos mantener un hilo temático, para que todo quedara dentro de un mismo marco general”, declaró Lanthimos en las notas de producción de a película.
Los tres relatos siguen a un hombre sin elección que intenta tomar las riendas de su propia vida; a un policía alarmado porque su esposa, desaparecida en el mar, ha regresado y parece otra persona; y a una mujer decidida a encontrar a alguien específico con una habilidad especial, destinado a convertirse en un prodigioso líder espiritual.
Stone, quien en el recién pasado Festival de Cannes aseguró que Yorgos Lanthimos es “su musa”, tuvo en la nueva cinta un rol más allá de la actuación. Antes del rodaje, el cineasta le compartió el guion a la británica, quien también aportó en el proceso de escritura.
“Me encantó el guion y cómo se desarrolló en un tríptico. Las historias se entrelazan de una manera que no es necesariamente clara, pero cada una capitaliza sobre la anterior. Las posibilidades me parecieron muy emocionantes”, explicó a la productora la actriz de La La Land.
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‘Tipos de gentileza’: Esto dice la crítica especializada
Nadie es monedita de oro, suele decirse. Pero es que el cine de Yorgos Lanthimos va más allá de que pueda o no gustar: polariza opiniones porque es incómodo y atrevido. Esto lo evidencia el criterio de la crítica especializada, que según el promedio del sitio web Filmaffinity le otorga una calificación de 6,4 sobre 10 puntos posibles.
Muchos consideran que su estilo bizarro y hasta a veces grotesco no tiene un trasfondo profundo, como defienden otros.
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Tal es el caso de Jordi Battle, de La Vanguardia, quien reseñó: “Para unos será el ‘rien ne va plus’ del estilo Lanthimos; para otros, una soberana tomadura de pelo (...) ¿Un cineasta sobrevalorado? Ya en desuso, hay un término preciso para calificar a esta estirpe: bluf”.
Incluso, Carlos Reviriego, de El Cultural, condenó totalmente al cineasta y aseveró en su crítica que “Lanthimos sigue en caída libre hacia la estulticia y la estupidez creativa en su producción hollywoodense (...) bobalicona, larguísima, aburrida película”.
No obstante, otros sectores ven en la cinematografía del director griego algo más allá que una ‘venta de humo’. Para Luis Martínez, de El Mundo, en la crueldad de Lanthimos se transmite un mensaje artístico renovador para el sétimo arte.
“Tríptico desasosegante y cruel (...) avanza (...) como una exhalación a veces desternillante, otras repulsiva y siempre convencida de que el cine también puede ser lo contrario de lo que parece”, argumentó Martínez.
Finalmente, Oti Rodríguez Marchante, de ABC, también calificó positivamente la película.
“Todo es puro Lanthimos, con esa concepción de la ‘bondad’ con la que juega el título tan en contacto con la ‘maldad’ (...) entre esos estercoleros mentales (...) divierte ver a una actriz tan sensata como Emma Stone (...)”, escribió Rodríguez.
