El mundo de la actuación y la comedia están de luto, la actriz y directora Penny Marshall falleció el lunes de 17 de diciembre en su casa en Hollywood Hills. Tenía 75 años.

Según reportó el portal de información especializado en farándula TMZ, la realizadora murió tras complicaciones por la diabetes, y ya había sido tratada por cáncer de cerebro y pulmón en el 2009. Su familia dijo en un comunicado: “Nuestra familia está desconsolada por el fallecimiento de Penny Marshall. Penny amaba los deportes, hacía rompecabezas de cualquier tipo, bebía leche y Pepsi juntos y le gustaba estar con los suyos”, informó el comunicado.

Marshall fue capaz de abrirse paso entre el machismo imperante del cine de estudio de los 80. Supo aprovechar con creces su primera oportunidad, que surgió después de que Howard Zeiff, el elegido por 20th Century Fox como director de Jumpin' Jack Flash (1986), renunciara al trabajo.

El filme sobre la relación de una empleada de banca en Manhattan con un espía británico perseguido por la KGB en el Este de Europa, resultó un éxito relativo en taquilla, con casi $30 millones en Estados Unidos.

Nacida en Nueva York, su primer papel relevante como actriz fue el de Myrna Turner en The Odd Couple, que fue dirigida por su hermano, Gary Marshall. Ahí fue donde la actriz pudo pulir y afinar sus talentos como comediante.

También apareció en Happy Days con Cindy Williams, y se hizo famosa por la serie de comedia Laverne & Shirley, estrenada en 1976 en los Estados Unidos y que se extendió con éxito durante ocho temporadas.

Posteriormente, incursionó en la dirección de películas como Big (película que catapultó la carrera de Tom Hanks en 1988). Además, dirigió a Robert De Niro y a Robin Williams en la cinta Awakenings, estrenada en 1990. Con esta película, la directora se consagró como una de las mejores, una ruptura con la comedia que había marcado su carrera hasta entonces. “Soy una persona depresiva”, indicó en una entrevista con el Los Ángeles Times. “La gente dice que fui muy valiente por hacer drama. No creo que fuera valentía. Pensé que tenía una excusa. Si salía mal, podía decir que no era mi punto fuerte”.

Eso sí, quizá la película por la que más se recuerde el legado de Marshall será A League of Their Own (1992), la cual es protagonizada por Hanks, Geena Davis y Madonna. Esta hermosa cinta relata la historia de un grupo de mujeres que forman un equipo de béisbol mientras la mayoría de los hombres combaten en la Segunda Guerra Mundial en 1943. Las chicas son entrenadas por un entrenador con problemas de alcohol: Jimmy Dugan –Tom Hanks–.

Marshall tiene una hija, Tracy Reiner, también actriz, y cinco nietos.

Hollywood se conmociona

Tras el fallecimiento de la actriz y directora, las estrellas de la industria hollywoodense le rindieron tributo por medio de sus redes sociales.

“Ayer estuve sosteniendo el Globo de Oro que me otorgó una vez Penny Marshall y pensé que hace rato no la veía. Ella fue la que me contó la historia de Jim Braddock, quien inspiró al película Cinderella Man. Penny era una mujer talentosa y muy amable, pero sobre todo ella amaba las películas. Descansa en paz”, afirmó el actor Russell Crowe, reconocido por sus películas como Gladiator y LA Confidential.

Por su parte, el periodista Daniel Irvin Rather Jr. recordó los buenos momentos que pasó con Marshall.

“Llorando la pérdida de una graciosa y enternecedora voz americana. Penny Marshall fue una pionera de la televisión y en la pantalla grande. Ella entendía que el humor viene de muchas maneras y que algunas verdades deben ser digeridas con los pies. Ella será extrañada”, enfatizó el comunicador.