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The Irishman es una película de Netflix digna de verse en la pantalla grande.
Por eso, el Cine Magaly logró que la cinta de Martin Scorsese fuera parte de su programación oficial y se proyecte a partir del jueves 21 de noviembre en sus instalaciones de Barrio La California.
La esperada cinta, que según los expertos tiene serias aspiraciones al premios Óscar, se inspira en el libro I Heard You Paint Houses: Frank “The Irishman” Sheeran and Closing the Case on Jimmy Hoffa, de Charles Brandt, escrito a partir de entrevistas con el agente criminal Frank Sheeran, apodado The Irishman (el irlandés).
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El exverdugo, interpretado en la cinta por De Niro, cuenta en ese libro que mató a más de 25 personas por orden del jefe mafioso Russell Bufalino (Joe Pesci) y de Jimmy Hoffa (Al Pacino), jefe del sindicato de camioneros.
Por ese motivo, la cinta de Scorsese es “la crónica de uno de los grandes misterios sin resolver en Estados Unidos: la desaparición del legendario sindicalista Jimmy Hoffa y un gran viaje por los turbios entresijos del crimen organizado, tales como sus mecanismos internos, rivalidades y conexiones políticas”.
Si usted desea comprar boletos de The Irishman en preventa, debe adquirirla en el sitio www.cinemagaly.com. La entrada tiene un precio de ¢2.700, más ¢450 por cargos de servicio.
Detalles de un gran filme
Para que De Niro luciera 30 años más joven, en su papel de Sheeran, la producción de The Irishman utilizó un procedimiento llamado “de-aging”, que permite rejuvenecer a un actor o una actriz de forma muy natural.
El efecto especial usa una tecnología desarrollada por Industrial Light & Magic, compañía creada por el director George Lucas. Los críticos que ya vieron la cinta dicen que el resultado es tan impresionante en su acabado, como todos los demás aspectos que encierra el filme.
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“Los grandes éxitos de la mafia, en clave crepuscular. Una monumental, elegíaca historia sobre la violencia, la traición, la memoria y la pérdida. Enorme y sólida, y también sorprendente y extraordinariamente delicada”, escribió The New York Times sobre la cinta.
La película sigue la tradición de las películas de gánsteres dirigidas por Scorsese, tales como Goodfellas, Casino o Los infiltrados, pero con una trama más cercana a hechos y personajes reales.
Este proyecto del cineasta, que recibió un Óscar por Los infiltrados, tardó más de 10 años en ver la luz y fue rechazado por varios estudios. Al final, Netflix aceptó producirlo, a pesar de tener un costo superior a los $140 millones.
