Ruta 47 (2013) —traducción al español de A Estrada 47 – es una película brasileña empeñada en contar la Segunda Guerra Mundial desde el punto de vista que ha estado ausente en otras producciones cinematográfica: la del único ejército latinoamericano que intervino en el conflicto.
En 1944, una tropa de 25.000 brasileños abandonaron su país para internarse en el norte de Italia durante uno de los inviernos más crudos que había vivido Europa hasta entonces.
Ruta 47 cuenta la historia de un grupo de soldados que asume, sin experiencia en batalla, la tarea de limpiar de minas el camino que da título a la cinta.
Pese a su contexto, el director y guionista de la cinta, Vicente Ferraz, asegura que no es una película de guerra. Su objetivo fue documentar de forma memorable las historias de los veteranos del suceso histórico.
“Es una película pacifista, no es de género. No van a ver tiros ni grandes combates. Es sobre las relaciones humanas durante la guerra”, explicó.
Ferraz se encuentra en Costa Rica para promover la distribución de la película. La cinta se ha distribuido en varios países de Europa y Asia; en Brasil alcanzaron varios reconocimientos en festivales de cine, incluyendo el de Mejor película en el Festival de Cinema de Gramado 2014.
Este año, consiguieron exhibir el largometraje en Estados Unidos y esperan que Costa Rica sea la antesala para recorrer las pantallas centroamericanas.
Para producir su proyecto, Ferraz contó con la colaboración de la costarricense Isabel Martínez, conocida en el país por dirigir la coproducción tica y brasileña El último comandante (2010).
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Según detalló Martínez, las ambiciosas dimensiones de Ruta 47 fueron un reto para las condiciones de producción de la industria de cine brasileña.
“Fue un proyecto bastante osado”, afirmó la tica. “Para hacerlo contundente, había que hacerlo en el lugar de los hechos. Es una ficción inspirada en hechos reales y tenía que filmarse en Italia. Filmar en la nieve es más lento y requiere experiencia”.
Completar el filme fue una tarea de Brasil, Italia y Portugal. En Italia, recibieron el apoyo del Ministerio de Patrimonio Cultural en Italia. En total, la inversión tuvo un costo de $4 millones, cifra que fue recopilada desde fondos estatales y el aporte de varios inversionistas privados.
Además del esfuerzo técnico, el equipo de los tres países reclutó actores de amplia trayectoria como Richard Sammel ( Bastardos sin gloria , 007 Casino Royale ); Sergio Rubini ( La Pasión de Cristo ) y Thogun Teixeira (de la serie de HBO Hijos del Carnaval ).
“La película habla del anonimato, de esa gente que quedó olvidada por la historia”, resaltó Ferraz, quien posteriormente produjo una serie documental con el testimonio de los veteranos que inspiraron su largometraje.
“Es un pequeño cuento en el que los protagonistas son italianos, brasileños y alemanes. Es un diálogo sobre todas esas culturas, que por una ironía del destino se encontraron en esa guerra”, dijo el director brasileño.