
Agentes de la Sección de Delitos Varios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizaron este martes ocho allanamientos en Puntarenas para desarticular a una organización criminal señalada de cometer extorsiones con páginas falsas de encuentros sexuales.
La operación consiguió la detención de 13 personas sospechosas y decomisar evidencia vinculada con las investigaciones. Los procedimientos se efectuaron en viviendas de El Progreso, El Roble, Chacarita y Barranca, con coordinación del Ministerio Público.
De acuerdo con el informe policial, la organización operaba desde 2018 y utilizaba perfiles falsos en páginas de citas sexuales.
La operación era de tipo transnacional, explicó el director del OIJ, Rándall Zúñiga, quien refirió que la banda en Costa Rica era liderada por una mujer de apellidos Rojas y 47 años de edad. Con ella, sus dos hijas y un hijo eran parte de la red criminal.
El grupo, explicó Zúñiga, ponía fotografías y perfiles falsos en sitios en línea de citas como señuelos para atraer a sus víctimas.
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Los delincuentes atraían a las víctimas con anuncios de mujeres disponibles para encuentros pero, al no concretarse los servicios, enviaban amenazas mediante llamadas y mensajes de texto para exigir pagos bajo la excusa de que las mujeres habían “perdido el tiempo”.
“Cuando los hombres contactaban al grupo, desde servicios de mensajería de redes sociales y WhatsApp, estos eran entretenidos al propio en un intercambio de mensajería cuya lógica era que, al final, nunca se diera el supuesto encuentro sexual. Ese era el engaño o estafa”, indicó Zúñiga.
Luego, una vez concluida la conversación, las víctimas eran contactadas por personas de la misma organización, quienes las acusaban por hacerle perder tiempo a las mujeres previamente y, por eso, debían pagar.
De lo contrario, se les amenazaba con matarlos a ellos y a sus familiares. Las víctimas accedían a los pagos que oscilaban entre ¢500.000 a ¢2 millones.
Las pesquisas determinaron que los perfiles eran ficticios y que los encuentros nunca se habrían realizado, incluso en caso de que las víctimas hubiesen aceptado pagar.
Hasta la fecha, se contabilizan 53 personas afectadas, con un perjuicio económico cercano a los ¢50 millones.
Los detenidos serán presentados ante el Ministerio Público, que definirá las medidas cautelares correspondientes.
Conexión en República Dominicana
Según el director del OIJ, las sumas extraídas con las extorsiones luego eran remitidas como remesas a República Dominicana donde, agregó, se presume que están los cabecillas del grupo.
“Cuando alguien se encuentre en una situación como esta, debe interponer la denuncia ante el OIJ por más que los delincuentes digan que supuestamente tienen esas comunicaciones vigiladas. Eso es completamente falso”, enfatizó.
Zúñiga indicó que esta no es la única banda dedicada a extorsiones mediante sitios de encuentros sexuales pues, dijo, hay otros grupos activos.
