
Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y del Ministerio Público realizan, la mañana de este martes, seis allanamientos en diferentes puntos del país, para desarticular una presunta organización criminal dedicada al robo de varias decenas de millones, mediante el uso de armas de fuego y equipos de acetileno.
La banda, conocida como Los Acetileno, operaba desde enero del 2025, en apariencia, bajo el liderazgo de una exempleada de la cadena de supermercados Walmart, de apellidos Granados Chavarría.
Desde las 4 a. m. de este martes, agentes de la sección de Robos del OIJ y de la Fiscalía Adjunta de Limón desarrollan seis allanamientos en esa provincia, específicamente en Guápiles, Pococí, así como en otras zonas del país, como León XIII, en San José.
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Según la orden de allanamiento —de la cual La Nación tiene un copia— la banda Los Acetileno es conocida, especialmente, por su método para perforar cajas fuertes y, en particular, se le investiga por un robo ocurrido el 19 de abril del 2025.
Ese día, ejecutó un supuesto plan criminal para sustraer ¢49,9 millones, en efectivo, en el supermercado Palí, de Hone Creek, en Talamanca.
En esa orden de allanamiento se detalla que Granados Chavarría, quien ocupaba el cargo de administradora regional de la zona atlántica en Walmart, presuntamente “se encargó de facilitar a las personas que tienen a su disposición recursos logísticos para la ejecución de esos actos delictivos (información respecto al tipo y cantidad de dispositivos de seguridad en el supermercado)”.
La estructura criminal incluía a otros ocho sospechosos, identificados con los apellidos Montero Gómez (alias Riel), Barrantes Barboza, Arce Barrantes, Alvarado Centeno, Martínez Cortés, Carmona Montero, Meléndez Acuña y Mora Sánchez.
Disfrazados como empleados de supermercado
Ese millonario robo se ejecutó el 19 de abril del 2025, entre las 6:10 a. m. y 6:42 a. m. cuando, según las pesquisas, los imputados llegaron al Palí “disfrazándose de empleados”.
Allí, en apariencia, contaron con la complicidad del entonces gerente, de apellidos Meléndez Acuña, quien “dejó de lado el protocolo de seguridad de la empresa Supermercados Unidos (Walmart)”.
Los sospechosos habrían “golpeado y privado de su libertad ambulatoria” a dos empleados, “a quienes amordazaron y amarraron sus manos, obligándolos a mantenerse encerrados en el baño del local comercial”, precisó el documento judicial.
Para acceder al dinero, utilizaron “un tanque de acetileno, y un tanque de oxígeno, con sus respectivos manómetros y sopletes”, con los cuales “rompieron la caja de seguridad (caja fuerte), marca Seyma, realizando un corte en forma de cuadrado irregular de 12 centímetros (cm) de alto y 15 cm de ancho”, se detalló también en dicho documento.

La pesquisa reveló además, la existencia de una “jerarquía de mando y distribución de funciones”, donde Granados Chavarría “planifica, ordena y controla todos los movimientos”, “valiéndose de su cargo en la empresa Walmart”, para facilitar información estratégica a los ejecutores materiales.
La Fiscalía investiga a los imputados por los presuntos delitos de robo agravado, asociación ilícita y privación de libertad agravada.
