Un grupo de delincuentes abría perfiles falsos en una página de citas sexuales para cazar desde ahí a sus víctimas y exigirles dinero a cambio de no asesinarlas a ellas o a sus familiares.
Según la información suministrada por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los afectados entraban a una página web específica y revisaban las ofertas de servicios sexuales disponibles. Luego recibían mensajes vía WhatsApp en los cuales le indicaban que debían pagar una “multa por solicitar información y hacer perder el tiempo de las supuestas mujeres de la página de Internet; de no realizar el pago amenazaban de muerte al ofendido y a su familia”.
Bajo este modus operandi, la Policía Judicial recibió 43 denuncias y de ese total, 16 víctimas pagaron la extorsión, para un perjuicio total de ¢5,9 millones.
Por este asunto la Sección de Delitos Varios abrió una investigación en agosto del 2020, que concluyó este jueves 16 de febrero con nueve allanamientos en diferentes puntos del Área Metropolitana como Alajuelita, Paso Ancho, Tibás y San José centro entre otros, producto de los cuales se logró la detención de seis mujeres y dos hombres, que figuran como sospechosos del delito de extorsión.
La Policía Judicial explicó que cada uno de los integrantes de la estructura criminal cumplía una función específica. En este caso, la organización era liderada por un hombre y una mujer, mientras que la mayoría de las sospechosas prestaban sus cuentas bancarias para recibir los depósitos producto del delito.
Una vez que la víctima entabla conversación con la persona detrás del perfil falso, ocurren dos opciones: en una el diálogo continuaba en una plataforma de mensajería de la página web y en otra es posible efectuar una llamada telefónica al número asociado al anuncio, es de esa forma que los delincuentes obtienen los datos telefónicos para luego proceder con mensajes amenazantes.
Finalmente, los detenidos fueron pasados con un informe al Ministerio Público para que se determine su situación jurídica. El artículo 214 del Código Penal impone penas de cuatro a ocho años de cárcel para aquel que, para obtener un lucro obligue a otro, con intimidación o con amenazas graves, a tomar una disposición patrimonial perjudicial para sí mismo o para un tercero.
“La pena será de cinco a diez años de prisión cuando la conducta se realice valiéndose de cualquier manipulación informática, telemática, electrónica o tecnológica”, agrega la norma.

Otros casos
En el pasado, el OIJ ha divulgado casos de sextorsión, donde una víctima visita una página de citas o anuncios sexuales y entabla conversación con otro supuesto usuario. Avanzada la conversación, el extorsionador le exige dinero a la víctima a cambio de no divulgar fotografías o videos íntimos o de no hacerle daño a su familia.
En ocasiones, los delincuentes incluso crean páginas falsas, para enredar al extorsionado y hacerle creer que está en una plataforma segura.
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