Cuatro policías penitenciarios que laboran en el Centro de Atención Integral (CAI) Carlos Luis Fallas, pasarán los próximos seis meses determinó el Juzgado Penal de Pococí, ya que figuran como sospechosos de integrar una banda narco.
Los policías responden a los apellidos Brenes Vega, Paguaga Jiménez, Anzora Salazar y Jiménez Sandoval. Otro expolicía apellidado Rivera González, quien había renunciado hace poco también pasará preso por el mismo periodo, confirmó el Ministerio Público.
A otras dos mujeres apellidadas Pérez Montero y Martínez Slack, además de los seis meses de cárcel se les impuso una fianza de ¢2 y ¢1 millón respectivamente.
Según las pesquisas, los funcionarios del Ministerio de Justicia cobraban hasta ¢900.000 por cada libra de marihuana que introducían al penal.
Aparentemente, también vendían celulares, hasta por ¢80.000 y cargadores en ¢20.000.
Las investigaciones contra el grupo empezaron en agosto del 2017, luego de que Justicia recibiera avisos de compañeros de los policías implicados. La información se trasladó a la Policía Judicial.
Asimismo, a cuatro personas apellidadas Enrique Thomas, Martínez Martínez, Araya Sibaja y Vargas Arias se les impuso medidas alternas a prisión, como los son el presentarse a firmar cada 15 días, no visitar el centro penal, impedimento de salida del país y no mantener contactos con el resto de imputados.
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Entre los imputados también figura un reo de apellidos Camacho Chaves, preso desde el año 2009 por un delito sexual.
En las cuentas de Camacho, según el OIJ, se registran transferencias internacionales de sumas ‘importantes’, por lo que coordinan con la Agencia para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), para ampliar las pesquisas y determinar si existen vinculaciones internacionales.