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El Consejo Superior del Poder Judicial ordenó separar del cargo, por un plazo de tres meses, al subjefe del Departamento de Investigaciones Criminales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Luis Guillermo Fonseca Herrera, a quien se le investiga por supuestamente filtrar información sobre un allanamiento.
El traslado fue acordado en la sesión del 17 de agosto y responde a una solicitud del Tribunal de la Inspección Judicial, como medida cautelar, confirmó la oficina de prensa del Poder Judicial.
La Inspección investiga a Fonseca Herrera porque, en apariencia, le avisó al fiscal adjunto contra la Delincuencia Organizada, Francisco Fonseca Ramos, de que iban a allanar la casa de su suegro.
Este último es un abogado de apellidos Martínez Fuentes, quien fue detenido el pasado 9 de agosto por supuestamente ser el notario de un grupo criminal que realizaba estafas en la adquisición de propiedades y vehículos.
Martínez Fuentes, de 64 años, y quien ahora descuenta seis meses de prisión preventiva, también es el padre de la fiscal adjunta de Limón, Karolina Martínez Solano. Ella está casada con el fiscal Fonseca Ramos. Asimismo, un hijo del imputado laboraba en la Fiscalía realizando suplencias en diferentes partes del país. A este último también se le investiga en la Inspección Judicial.
'Hubo un gesto de lealtad'
Jorge Chavarría Guzmán, fiscal general, confirmó en conferencia de prensa, el 9 de agosto anterior (día en que fue detenido el abogado Martínez), que un oficial del OIJ llamó al fiscal Fonseca para avisarle del allanamiento en la casa de su suegro.
Según agregó el jerarca del órgano acusador del Estado, esa situación que puso en peligro toda la operación.
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"Ni la fiscal de Limón ni el adjunto de Delincuencia Organizada sabían de la investigación (empezó en el 2014). Se enteraron ayer (8 de agosto) por la infidelidad de un oficial del OIJ, pero, a pesar de eso, el éxito del operativo denota que manejamos bien la situación para que no fracasara (...). Hubo un gesto de lealtad al llamar y decirle a Francisco Fonseca; sin embargo, ellos no intervinieron porque son fiscales de experiencia. Si ellos hubieran hecho algo estarían presos hoy", manifestó Chavarría Guzmán en las declaraciones que dio a la prensa.
Este diario le consultó al fiscal general quién era ese oficial del OIJ, pero prefirió reservarse el nombre y que fuera el director del OIJ, Wálter Espinoza Espinoza, quien lo diera a conocer.
La Nación consultó en aquel momento a la oficina de prensa del Organismo sobre quién era dicho oficial, pero manifestaron que no podían darlo a conocer por estar el tema bajo investigación en la Inspección Judicial.
Este miércoles, luego de conocer que no se trataba de un oficial raso del OIJ, sino de un alto jerarca, este diario trató de obtener una reacción del director del OIJ, pero reiteró, a través de la oficina de prensa, que no se iba a referir al asunto.
Por su parte, en el Ministerio Público no descartan abrir una causa penal en contra del subjefe de Investigaciones Criminales.
"E n contra del funcionario se abrió una causa disciplinaria que ya está investigándose en la Inspección Judicial. Dependiendo de los resultados que arroje ese proceso disciplinario, se valorará la apertura de una investigación penal", indicó la Fiscalía, por medio de su oficina de prensa.
La orden del Consejo Superior establece que la Dirección del OIJ deberá determinar, bajo sus competencias y facultades legales, el despacho al cual será enviado Fonseca Herrera; empero, no hubo respuesta por parte del Organismo para indicar dónde será trasladado.
El artículo en el cual se basa el Consejo Superior de la Corte es el 202 de la Ley Orgánica del Poder Judicial. En él se establece que: "Si los hechos denunciados pudieren ser sancionados con revocatoria de nombramiento o suspensión, o si otras circunstancias lo hicieren aconsejable, el Tribunal de la Inspección podrá separar preventivamente al servidor del cargo hasta por tres meses, con goce de salario".
