La Unidad de Ingeniería del Cuerpo de Bomberos determinó que una falla eléctrica causó el incendio ocurrido la madrugada del jueves 8 de abril, en la zona franca Bes, en el Coyol de Alajuela.

Tras cuatro días de análisis en laboratorio, testimonios y videos, el equipo a cargo de la investigación concluyó sus labores y entregó el informe.

El fuego comenzó a las 3:44 a. m. en la nave del costado sureste de la estructura, “donde unos cables dañados y sin protección habrían hecho contacto directo con productos de polietileno ya terminados”, dice un comunicado del Cuerpo de Bomberos.

Las llamas afectaron dos naves industriales de 4.866 metros cuadrados, de las empresas Prodex y Proplax.

La primera cuenta con más de 200 trabajadores y produce aislantes térmicos y empaques. Asimismo, exporta a 28 países sus productos, principalmente en mercados de América Latina y Estados Unidos.

Por su parte, Proplax fue fundada en 1964, tiene 63 colaboradores y se dedica a soluciones de envases para la industria y el consumo. Además tiene más de 50 años de especialización en termoformado e inyección.

Ambas empresas tenían sus seguros al día.

Aunque a la hora del incendio había personal laborando, no hubo víctimas humanas que lamentar.

La emergencia fue atendida por bomberos de Alajuela, Belén, Heredia, la Estación Metropolitana Sur y Santo Domingo.

Hasta el 31 de marzo, la Unidad de Ingeniería de Bomberos había investigado 29 incendios en todo el país, donde el 48% de las causas se deben a fallas en sistemas eléctricos.

Héctor Chaves, director de Bomberos, afirmó que en el mercado hay materiales muy variables para las instalaciones eléctricas, pero llamó a hacer un esfuerzo para usar los más apropiados, a sabiendas de que se trata de una inversión que puede salvarles de un incendio.

También insistió en que cualquier instalación o reparación del sistema eléctrico en casas u otras estructuras sea realizada por personal calificado.

Causa similar al de Turrialba

El incendio ocurrido el Viernes Santo en el mercado de Turrialba también se debió a una falla eléctrica.

Según Ingeniería de Bomberos, la causa de la conflagración del 2 de abril a las 5:45 p. m., se originó en un refrigerador pequeño que se usaba para guardar medicamentos en una veterinaria afectada por las llamas.

Ardieron 529 metros cuadrados de locales comerciales aledaños al mercado. El trabajo de un cisterna y tanqueros, así como unidades extintoras y cerca de 30 bomberos, permitió salvar más de 2.200 metros cuadrados de construcción amenazada, incluido el mercado.

Bomberos de Turrialba, Juan Viñas y Pacayas atendieron la emergencia en una estructura de dos niveles, de 1.000 metros cuadrados donde se quemó poco más del 50%.

Por tratarse de un día feriado, no había gente en los locales quemados. Aunque algunos propietarios llegaron para poner pertenencias a salvo, no hubo particulares afectados por las llamas.

Esa vez la Cruz Roja solo atendió a bomberos con problemas por la inhalación de humo.