
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) informó que el martes 11 de noviembre de 2025 ingresó al país el empuje frío N.° 3, lo que ha generado un escenario muy lluvioso en el Caribe y la Zona Norte, sumado al paso de la onda tropical N.° 44.
Durante la mañana, Guápiles registró 100 milímetros (mm) de lluvia en dos horas, mientras que en Batán se midieron 55 mm, en Sarapiquí 61 mm y en Siquirres 34 mm.
En el Pacífico Sur, las lluvias alcanzaron 30 a 80 mm, especialmente sobre la península de Osa.
Según el pronóstico del IMN, las precipitaciones aumentarán conforme continúe la interacción entre estos sistemas atmosféricos.
Durante la noche del martes y la madrugada del miércoles, se esperan acumulados de 50 a 80 mm en el Caribe y zona norte, con posibles máximos de 120 mm en 6 a 12 horas.
En el Valle Central y zonas montañosas, se prevé nubosidad con lloviznas, con montos de 5 a 20 mm en zonas bajas y hasta 50 mm en áreas altas.
En el Pacífico Sur, se pronostican aguaceros fuertes en la tarde y noche, con acumulados entre 40 y 80 mm, incluso más en sectores puntuales.
El IMN también indicó un incremento en la velocidad del viento, con ráfagas entre 40 y 60 km/h, que podrían alcanzar los 80 km/h en zonas montañosas y el norte de Guanacaste. Además, la presencia de nubosidad y vientos acelerados reducirá las temperaturas diurnas entre 2 °C y 5 °C en el Caribe, Valle Central, zona norte y Pacífico Norte.
Se prevé que la onda tropical N.°44 salga del país en la noche, mientras que los efectos del empuje frío N.°3 se extenderán hasta el miércoles, disminuyendo significativamente el viernes.
El IMN advirtió que los suelos se mantienen altamente saturados en el Pacífico Sur y las cuencas de la zona norte y Caribe, lo que incrementa el riesgo de deslizamientos e inundaciones repentinas por crecidas de ríos.

Recomendaciones del IMN:
- Evitar zonas propensas a inundaciones, quebradas o alcantarillas en el Caribe y Zona Norte.
- Tomar precauciones por fuertes vientos, sobre todo en cordilleras y Guanacaste.
- Precaución en la navegación aérea y marítima por posibles turbulencias y mar picado, especialmente en el Pacífico Norte y Golfo de Nicoya.