
Marvin Pérez Saballos, el hombre de 32 años fallecido el 19 de mayo en una expedición por las montañas del Zurquí, estaba a punto de graduarse como administrador de empresas, y también había estudiado Contabilidad.
Pérez, vecino de la Ciudadela Quince de Agosto, en Tirrases de Curridabat, empezó a trabajar desde muy joven como ayudante de carnicería en una cadena de supermercados, contó a La Nación Erika Jarquín Cordero, quien trabajó muchos años para una empresa que le daba servicios a los supermercados, y así conoció a Pérez desde que él tenía 18 años.
Jarquín lo consideraba como un hijo, e incluso él se refería a ella como “mi mama”.
“Era un chiquito humilde, trabajador, buen hijo. Siempre tenía sus metas, por llegar a cumplirlas. Ya uno como persona adulta lo que hacía era aconsejarlo. Nos veíamos y él me decía que tenía la fe de salir adelante”, afirmó.
LEA MÁS: Rescate en el Zurquí: Cruz Roja confirma muerte de montañista
Se dejaron de ver por algunos años, hasta que se lo topó en traje entero en un supermercado en Tirrases, donde él le contó que había logrado llegar a la universidad.
“Me sentí muy orgullosa de saber que un muchacho con tanto futuro se llegó a superar, y bueno, le faltaba poquito para cumplir la meta de graduarse de Administración de Empresas”, relató.
“Él era un buen hijo, buen compañero de trabajo, un buen vecino. Era un muchacho sin vicios. Un muchacho que realmente para la edad que tenía le faltaba un montón”, agregó.
Agregó que a Marvin le encantaba la aventura, el montañismo y los deportes. “Lastimosamente pasó esta tragedia, que realmente no le encuentro ni pies ni cabeza. Sinceramente, porque todo el mundo habla de lo que pasó, pero realmente no sabemos qué fue lo que pasó”, afirmó Jarquín.
Según los reportes, Marvin estaba con una expedición guiada junto a otras diez personas en una zona frecuentada por incursiones turísticas ilegales, según han señalado las autoridades. Entraron por la ruta 32 a una zona conocida como Las Ventanas, pero en medio del trayecto se quedaron sin señal. Esa noche, a las 8 p. m., el 9-1-1 recibió la alerta de la desaparición de los montañistas.
Esa misma noche, tres de los desaparecidos salieron por Paracito de Santo Domingo, en Heredia. El guía informó a los rescatistas que uno de los miembros del grupo había fallecido, lo cual fue verificado por la Cruz Roja hasta la mañana siguiente. Ese lunes ubicaron a siete de los desaparecidos, y a pocos metros estaba el cuerpo de Marvin, quien al parecer se golpeó el pecho tras caer por un precipicio.
Según versiones extraoficiales, después de golpearse, intentó caminar, pero se desvaneció y no volvió a reaccionar.
Marvin cumplía años este viernes. No tenía esposa ni hijos, y según su padre, Marvin Pérez, soñaba con formar una familia, pero primero quería terminar sus estudios. Su padre también le había advertido que tuviera cuidado en su expedición.
“Yo le dije ‘papi, tenga cuidado, no se exponga’. Era la primera o segunda vez que hacía estas salidas”, comentó don Marvin, dos semanas antes del accidente.
De acuerdo con la Cruz Roja, es importante que antes de que las personas se adentren en la montaña para realizar este tipo de actividades, contacten al Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) para confirmar si la zona donde se pretende realizar el trayecto es segura.
