
El ajo contiene una sustancia llamada alvina que es la responsable de aportar múltiples beneficios al organismo humano, entre ellos:
1. Mejora el funcionamiento del corazón, aumentando el rendimiento físico y protegiendo contra las subidas de tensión y el envejecimiento.
2. Aumenta las enzimas antioxidantes del ser humano y reduce considerablemente el estrés oxidativo en personas con hipertensión, principalmente cuando se consume el ajo fresco.

3. Ayuda a reducir el colesterol y la presión sanguínea, además de ayudar a prevenir el Alzheimer, los derrames cerebrales y la demencia senil.
4. El ajo puede reducir los resfriados comunes porque aumenta las defensas y es un antibiótico natural.
5. Mejora el desempeño físico. De hecho, en la Antigua Grecia se vinculaba el consumo de ajo al aumento de las capacidades físicas y se le administraba a los atletas.