La llegada de la Selección de Costa al Estadio Nacional le erizó la piel a todos, la entonación de la Patriótica Costarricense hizo que el pecho se inflara y el Himno Nacional cantado a toda voz por 35.000 personas sacó hasta lágrimas, pero la noche no fue mágica por todo esto; en realidad fue espectacular por el gane de la Tricolor y por dos resultados más que acomodaron casi todo a la perfección para no depender de nadie más.

Lo primero es que la Sele hizo lo que muchos pensaban imposible: derrotó al líder Canadá, al equipo invicto del octagonal, al más goleador, al que menos goles ha recibido y al que pensaba que sellaría su boleto al Mundial de Catar 2022 en suelo tico.
Si este triunfo 1 a 0 se trajo abajo las apuestas, el empate de Panamá ante Honduras (1 a 1) se alineó de manera inesperada. Es más, hasta la igualdad de Jamaica ante El Salvador (1 a 1) favoreció y aunque México fue el único que le “falló” a los costarricenses con su 0 a 0, igual sirve un poco. ¿Por qué planteamos todo esto?
Es fácil de explicar, ahora la Nacional tomó el cuarto lugar del repechaje que le pertenecía a los panameños, y les sacó un punto de ventaja (19 a 18). Es decir, como mínimo se garantizó la repesca sin ver a los demás en el cierre, esto si se ganan los dos partidos que restan ante unos cuscatlecos ya eliminados y contra los estadounidenses en la Joya de La Sabana.
De igual forma, la Tricolor dio un paso que ilusiona a ir directo a Catar, debido a que está a tres unidades del Tri y también de los de las barras y las estrellas.
“Es una victoria del país completo. Los jugadores sacaron las fuerzas de esas buenas vibras que recibieron durante toda la semana, en la llegada y en el partido. Antes estábamos a tres pasos, ahora a dos y creo que Costa Rica ganó cinco puntos, los tres que se sacaron ante Canadá y los dos que perdió Panamá”, dijo Rodolfo Villalobos, presidente de la Federación Costarricense de Fútbol.
Para ser claros, los aztecas tienen un camino que parece sencillo, si se toma en cuenta que visitan a una H sin chances y si fallan, cierra con los salvadoreños como locales. De todos modos, con el triunfo en suelo hondureño están adentro sí o sí.
Es decir, la pelea por el boleto sin escalas a la Copa del Mundo está con Estados Unidos y Panamá, quienes justamente juegan entre sí en la siguiente jornada en territorio gringo. Lo ideal sería como mínimo un empate en este duelo o un gane canalero que, combinado con un triunfo de la Nacional en el Cuscatlán, deja la mesa servida para el cierre de la Selección.
Sin embargo, sumar de a tres en todos los choques que restan es lo que vale, ya que el gol diferencia tico es de +2, mientras que el de los estadounidenses es de +9 y el de México de +6.

