El yudoca Ian Ignacio Sancho adelantó que iba a los Juegos Olímpicos de Tokio a hacer historia y llevarse por delante a quien le pusieran. En menos de cuatro minutos cumplió su palabra al ganar su combate y ser el primer costarricense en avanzar a la segunda ronda de esta disciplina.
Sancho dejó sangre sobre el tatami del Nippon Budokan y con una gran demostración de estratégica y táctica sometió al albano Indrit Cullhaj, a 21 segundos del final de su enfrentamiento.
Pese a sufrir una cortada en uno de los dedos de su mano izquierda y de mostrar un ligero corte sobre el ojo derecho, el atleta oriundo de Alajuela no se dio por vencido y dejó ver la tenacidad y la categoría que forjó desde los cinco años, cuando se inició en una disciplina que también es la pasión de su familia.
Ignacio, de 28 años, realizó un waza-ari (medio punto) gracias a someter a su rival con un giro y dejarlo tendido. Cullhaj necesitó atención médica y no pudo continuar, por lo que al nacional se le asignó el Ippon; la mejor manera de conseguir la victoria en el combate y la puntuación más alta en este deporte.
Ahora el tico se enfrentará al representante de Corea del Sur, Kor An Baul, quien se ubica en el tercer lugar del ranquin mundial y es uno de los grandes favoritos a dejarse la medalla de oro.
“Para estos Juegos Olímpicos me siento muy bien física y mentalmente y voy con la actitud de ganarle al que me pongan al frente. Más allá de enfocarme en el resultado, estoy concentrado en el proceso y lo que debo de hacer para mostrar mi mejor versión. “Evidentemente apunto a un resultado, pero no quiero visualizar algo específico, sino en lo que debo de hacer para ganarle a cualquiera”, dijo el atleta a este medio previo al partir a suelo japones.
Ian es el yudoca número 14 de Costa Rica en participar en una olimpiada, según el periodista y estadígrafo Joseph Fernández. El balance hasta hasta este combate en 19 enfrentamientos de los ticos era de 17 derrotas y dos eliminaciones. Sin embargo, Ignacio acabó con esta racha.
El yudo corre por la sangre de toda la familia Sancho, ya que su padre, Andrés, participó en los Juegos de Los Ángeles 1984. Además, sus tres hermanos y su madre también practicaron o practican la disciplina.
Incluso, por muchos años el papá de Sancho fue su entrenador y en este momento uno de sus hermanos, Julián, es quien lo acompaña como su técnico en Tokio.
El nacional estudia y entrena desde hace cuatro años en suelo japones, propiamente en la Universidad de Tokai, una de las más prestigiosas del gigante asiático.
Los competidores se dividen en dos cuadros, cuyos ganadores acceden al combate por el oro. Los ocho mejores yudocas de cada categoría serán clasificados de tal manera a evitar que se enfrenten prematuramente.
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Los perdedores de los cuatro duelos de cuartos de final acceden al repechaje (o repesca). Los dos ganadores del repechaje avanzan a combates por el bronce separados, donde medirán al perdedor de la semifinal del otro cuadro.