Juan Ramón Fallas mantiene su reinado en el Chirripó a pesar de la falta de apoyo

San Gerardo de Rivas, Pérez Zeledón. El reinado de Juan Ramón Fallas Navarro en la Carrera del Chirripó se mantuvo intacto, al ganar este sábado por sétima ocasión la exigente prueba de campo traviesa de 34 kilómetros.

El atleta de Olán de Buenos Aires demostró una vez más su enorme capacidad para vencer el fuerte ascenso de 17 kilómetros entre la plaza de deportes de San Gerardo de Rivas y Base Crestones, y posteriormente descender de forma trepidamentre para afianzar su primer lugar en forma inobjetable.

Sin embargo, toda la alegría del corredor bonaerense contrasta con el sentimiento de impotencia al encontrar poca ayuda, falta de patrocinadores, así como malos premios en las competencias de montaña, en las que ha llegado a recibir ¢10.000 por triunfar en un evento.

En la edición 30 Juan Ramón no solo derrotó el temible recorrido lleno de obstáculos por los senderos del macizo, sino además se sobrepuso a una salida accidentada, pues en el momento en que dieron la partida el corredor de 32 años se encontraba en el servicio sanitario, por lo que salió de último y tuvo que sobrepasar en los primeros metros a gran parte de los 224 corredores que tomaron la salida.

Juan Ramón concluyó con un tiempo de tres horas, ocho minutos y dos segundos (3:08:02), seguido por su hermano Juan Luis con 3:09:13, mientras Abraham Serrano fue tercero con 3:17:41.

A ellos hay que añadir que venció contundentemente a los guatemaltecos Juan Alfredo y Édgar Saquiquel Chicos, por una diferencia de 47:27 y 1:27:05, respectivamente, quienes tenían más de un mes de estar en el país preparándose para intentar destronar a Juan Ramón y su hermano Juan Luis.

“Debo agradecer a mi patrocinadora Gineth Soto, quien es la que me tiene acá, así como Nutrifisio y otras personas que me ayudan para poder competir. Sino fuera por ellos para mí sería muy difícil, porque tengo una familia que mantener y no es fácil. Además, quiero dedicarle la victoria a mi padre Francisco, quien se recupera de un derrame cerebral”, comentó Juan Ramón.

El gemelo confesó que cuando el dinero no alcanza, por su poca escolaridad le es difícil encontrar trabajo, más allá de hacer labores agrícolas o chapear algún terreno cercano a la localidad de Santa María Brunca, donde reside con su familia.

“Un atleta como César Lizano es profesional y solo se dedica a correr, en cambio mi hermano (Juan Luis) y yo debemos trabajar para mantener a nuestras hogares. A veces la plata no alcanza porque debemos pensar en comprar las tenis y otros implementos, los alimentos y pagar los pasajes. Por eso es complicado correr largo, pero debemos hacer el sacrificio”, admitió Fallas.

Pero Juan Ramón, además de sobreponerse a esos inconveniente debe lidiar con malas premiaciones, lo cual para él es frustrante y hasta una falta de respeto, por lo que afirmó que debe ser más selectivo en el futuro.

Clasificaciones

“No todas las carreras de montaña pagan bien como la del Chirripó (¢300.000 al ganador). Por necesidad he tenido que participar en algunas que dan premios de ¢20.000 o ¢10.000 colones y no alcanza para nada, ni siquiera para pagar los gastos de transporte. Siento que es una falta de respeto para nosotros, porque demostramos que somos los mejores atletas de montaña del país, pero son pocas las personas que nos ayudan a seguir”, sentenció Fallas.

Precisamente ante las adversas situaciones que ha vivido en los últimos meses decidió realizar cursos de bombero voluntario en el área forestal, pensando en un futuro poder ser incorporado y ganarse la vida honradamente.

“Siempre me ha gustado la naturaleza, por esa razón es que decidí tomar esos dos cursos dos sábados, aunque perdí los entrenamientos de pista. Es una buena oportunidad y traté de aprovecharla, tal vez en futuro me llamen y no solo pueda combatir los incendios aquí, sino además ayudar en otros países, si así me requieren”, comentó Fallas, que pese a todo anhela seguir su reinado en el Chirripó.

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