El tiempo parece no hacer mella en dos gladiadores capaces de imponerse en trillos, caminos empedrados o senderos intransitables.
En poco más de dos meses, Enrique Artavia y Federico Lico Ramírez se coronaron campeones panamericanos de ciclismo en dos ocasiones, en las modalidades de cross country y gravel, demostrando que la edad no es obstáculo para seguir dándole triunfos a Costa Rica a nivel continental.
En el caso de Kike Artavia, se impuso en ambas competencias en la categoría Máster A: en abril pasado en el circuito de Pedregal de Belén (cross country) y este sábado en la Hacienda Sol y Mar, en Colorado de Abangares (gravel).
LEA MÁS: Colombiano es el monarca del inédito panamericano de ciclismo que organizó Costa Rica
Por su parte, “Lico” Ramírez dominó la categoría Máster B, adjudicándose el primer lugar en las mismas competencias que Artavia.
Artavia, oriundo de Birrisito de Paraíso de Cartago, suma ya cuatro títulos continentales: tres en cross country y uno en gravel. Mientras tanto, su vecino Lico, de Cot de Cartago, logró sus dos primeros títulos panamericanos, un sueño que venía persiguiendo desde hace años y que por fin se hizo realidad.
Enrique Artavia, quien también se coronó campeón mundial de ciclismo de montaña en 2023, en Argentina, se mostró feliz por alcanzar el tetracampeonato panamericano, y aseguró que no fue nada fácil, especialmente en la exigente modalidad del gravel.
“La verdad me siento muy contento. Lo que hemos logrado no es sencillo. Había muchos factores en juego. Para mí, fue una carrera de eliminación: hubo caídas, pinchazos, desperfectos mecánicos y, prácticamente, me desgasté mucho, porque no es como una carrera de ruta”, explicó Artavia.
En esta ocasión, Kike superó al tico Helbert Herrera y al guatemalteco Rodrigo Goicoechea.
Por su parte, Lico Ramírez había esperado mucho tiempo para convertirse en campeón de América, y jamás imaginó lograrlo en dos eventos consecutivos y en suelo costarricense.
“Estoy muy contento por ser campeón panamericano por segunda vez, y sobre todo por conseguirlo en nuestro país. Esta fue mi primera carrera en gravel y resultó muy exigente a nivel mental. En cuanto al equipo, agradezco a mis patrocinadores y a Innovabike por apoyarme, lo que me permitió competir y ganar”, declaró Ramírez.
Lico enfatizó que no fue una tarea sencilla, aún más por la calidad de los rivales y la exigencia de un evento en el que no había tiempo para descansar; había que correr siempre al máximo para no quedarse atrás y marcar diferencia.
Federico Ramírez se impuso a los también costarricenses Cristian Palomo y Alexander Meza.