Christian Bolaños consiguió en el 2020 tener un año profesional para no olvidar. El mundialista en 2006, 2014 y 2018 consiguió ser figura en Costa Rica, como goleador del Saprissa y comandar al equipo hacia el título 35, además de dar el salto al exterior y volver, a sus 36 años, a ser legionario.
Bolaños se vinculó al IK Start de Noruega, donde espera continuar su carrera deportiva en el 2021. Christian evaluó con La Nación su presente, pero también aprovechó para reflexionar sobre el momento que vive la Selección Nacional, en un año tan complejo sin una sola victoria.
¿Lo sorprendió el 2020? Logra en su año 36 de vida ser goleador y volver a Europa.
Yo me muevo a base de objetivos, la verdad soy muy competitivo y sigo disfrutando mucho el fútbol. Muy contento por el título 35, el ser el mejor del torneo, la regularidad; la verdad, disfruté mucho y cumplí los objetivos, inclusive, más de lo que mucha gente pensaba. Al final yo solo quiero competir que es lo que me gusta.
Ahora estoy al frente de otra competición, llegué a un club en el que había estado. Ellos ya tenían campeonato comenzado y me llamaron para mantener la categoría y ese es el reto. Mi contrato termina en diciembre y ahora estamos peleando partido a partido para estar en Primera División. Ahora estamos jugando cinco finales, en las cuales debemos hacer las cosas bien para mantener el equipo en Primera División.
Por primera vez en la temporada, el Start está en zona segura. ¿Cómo valora esto?
Era intentar. Yo en lo personal tenía que adaptarme lo más rápido posible, por dicha me quieren mucho, el club y la ciudad me han arropado bastante y yo solo intento aportar mi grano de arena. El equipo ha cambiado mucho y hemos obtenido buenos resultados, nosotros estamos en mala posición por el arranque, hasta la fecha eso estamos sufriendo, pero hay mejores sensaciones ahora, estoy motivado porque el objetivo primordial no se ha logrado pero estamos muy cerca.
Usted acaba contrato en diciembre. ¿Qué pasará con su carrera?
De primera mano cuando salí de Costa Rica pues lo hice en buenos términos con Saprissa. Yo sé que no tengo 20 años, sé que estoy cerca de dejar el fútbol, pero quiero seguir disfrutando. Me gustaría que el equipo se quede en Primera División, ellos ya me han dicho que tienen la intención que me quede un año más, pero debo esperar a que termine el torneo y ahí me sentaré a hablar con la gente de acá y ver qué se puede hacer.
El 2020 le entregó el premio a Mejor Jugador del torneo tico, además lo pone como figura en Noruega.
Yo no puedo ser mezquino y dejar de lado todo lo difícil que ha sido este año para el mundo, esta situación nos ha tocado muy fuerte, pero yo en lo profesional he alcanzado objetivos que me llenan mucho, me hacen estar contento, me hacen seguir compitiendo y alimentando todas esas preguntas que la gente se hace sobre cuándo me voy a retirar; ahí yo contesto sin decir una sola palabra.
¿Sacó la palabra retiro de su vocabulario? Además, creo, del vocabulario de la gente, porque todos los años se le preguntaba si ya era la última temporada.
Tuve que lidiar casi seis años (risas)... Para uno a veces es difícil explicar lo que uno puede hacer, es algo muy sencillo, yo tampoco soy tonto y sé que ese día llegará, esto es parte de la vida, a nosotros nos cuesta más tomar la decisión, pero he llenado la bolsa de objetivos y he cumplido todo. No puedo pedir más, ahora lo que toca es disfrutar. Ojalá pueda seguir jugando dos años más, yo me siento bien y ojalá pueda competir hasta donde sea permitido.
¿Cuál es la clave para mantener la carrera que usted ha hecho? ¿Qué le diría a los jóvenes?
En lo personal, creo que lo más importante en lo que ha sido mi carrera fue ser humilde, escuchar a los jugadores que tenía al frente, nunca pero nunca quise compararme con algún ídolo o joven que admiraba. La parte primordial es aprovechar los momentos, porque siento que hoy en día todo es más fácil, siento que hay muchas puertas abiertas en la actualidad que antes no estaban, a las nuevas generaciones les ha costado menos dar el salto, llegar a primera, ir al extranjero... Porque por ejemplo, la MLS ya es como cambiar de equipo en Costa Rica... Entonces esa es la parte donde los jóvenes no deben conformarse con que ya llegaron, porque no hay filtro de lucha, de que tenés que demostrar. Antes el joven no le quitaba el campo a nadie, sino que el joven se abría el campo con ganas de comerse el mundo.
¿Hoy agradece que en sus inicios estuvo en el Saprissa que sufrió prácticamente una quiebra técnica?
Sí, es que a ver... Si yo me regreso, yo me acuerdo los líderes del equip... Por ejemplo, cuando debuté me acuerdo de que llegó el día antes Lonis y me dice: ‘chamaco, mañana va contra Berry’, en ese momento lateral de la Selección. Y me dijo: ‘Chamaco o la toma o la deja’... Pero hoy en día eso no se le dice a los jóvenes. Yo gracias a Dios pude vivir esa última etapa de la vieja escuela y las nuevas generaciones no son así, esto se ha perdido.
¿Cuál es la expectativa para 2021?
No sé, no sé. Me encantaría quedarme en Noruega, en primera división, no sé cuánto tiempo, pero me gustaría. Todo lo que venga no lo sé... No sé qué pasará con la Selección, pero no lo dejo de lado y si llega la oportunidad pues aunque he hecho muchas cosas en tantos años, pues pongo en la mesa la posibilidad.
Con su experiencia en Selección Nacional al estar en Alemania 2006, Brasil 2014 y Rusia 2018. ¿Qué le pasa al equipo patrio?
Todos lo sabemos, yo creo que no hay que buscar mucho, todos sabemos lo que causó la partida de Gustavo Matosas, eso fue un problema que le quedó al nuevo entrenador, porque cuando hay cambio generacional entra de golpe. Han pasado muchas generaciones en ligas menores que no han cumplido objetivos y todo se va cortando. La Selección Mayor es la que muestra todo y ese es el mayor problema. Ojalá se pueda armar un buen conjunto para las eliminatorias y se clasifique, porque si Costa Rica no clasifica todos saldremos afectados y podría ser lo peor para la economía del fútbol.
¿En Costa Rica si vuelve a jugar solo jugaría con Saprissa?
El fútbol pasa por eso, momentos, circunstancias, directivas, uno siempre tiene un equipo, en mi caso es Saprissa y el marco perfecto para mí sería acabar ahí, retirarme ahí, pero el fútbol es tan cambiante.