
Alonso Solís es sinónimo de Saprissa. El Mariachi habló con La Nación sobre cómo quedó la serie final de segunda ronda ante la Liga Deportiva Alajuelense, luego del empate 2-2 que se dio en el Ricardo Saprissa. Ahora todo se definirá el próximo sábado, a las 7:00 p. m., en el Morera Soto.
Solís confesó que lo ideal era que el Monstruo ganara, pero fue enfático en que ir a Alajuela a ganar no es nuevo para la S, al punto que recordó que las imágenes que se le vienen a la mente de cuando era jugador, en ese escenario, son de celebración.
—¿Cómo visualiza el cierre de la serie luego del 2-2?
—Yo creo que lo ideal era ganar, pero la serie está súper abierta. Saprissa sabe hacer buenos partidos en Alajuela; tiene gol, somos fuertes en bola muerta y también tenemos jugadores en un momento importante. La final está pareja y eso da vistosidad.
—¿Con qué se queda de Saprissa y qué debe mejorar el equipo?
—A mí me gustó el primer tiempo, pero en el cierre le faltó manejo de la posesión del balón, porque eso hubiera ayudado a evitar los goles. Los seis minutos de ellos fueron porque se entregó la posesión.
—¿Qué tan fuerte puede ser el Morera Soto para jugar contra Saprissa?
—Obviamente la localía juega. Sabemos que estará lleno, pero yo en la Liga tengo buenos recuerdos de partidos y de goles; entonces uno quisiera que los muchachos saquen la victoria, porque siempre se ha podido. El estadio estará a favor de ellos, pero eso no es determinante.
—¿Puede ser un arma de doble filo para la Liga?
—Eso en este punto ha quedado atrás, porque ellos ya saben lo que es golpearse; de los golpes se aprende. Siento que los últimos partidos finales ellos los han ganado, pero Saprissa no se puede confiar.
—¿Qué significaría quedar campeón en este torneo?
—Como saprissista sería un orgullo, porque, aparte de eso, siempre es bonito ganar los clásicos. Sería muy especial llegar a 41 títulos allá (en Alajuela).

—En el saprissismo se habla de que, más allá de lo que pase, se espera una reestructuración del equipo…
—Los equipos siempre tienen que estar en constante cambio. A ver quiénes se van; siempre se puede mejorar más, las ligas menores, todo suma. Es un cambio constante en un equipo como Saprissa. Yo creo que la planilla de Saprissa tiene dos campeonatos de no ser campeón; el cambio debe ser la constante. Si falta alguien o si alguien no rinde, pues en Saprissa solo pueden estar los que rinden. El cambio es lo más normal en Saprissa.
—¿Cómo ve el liderazgo de Erick Lonis desde la dirigencia?
—Me alegra muchísimo tener a alguien de la casa, aparte de que sea tico. Yo siempre pienso que nos tiramos para abajo (a los costarricenses), así que ojalá que a Erick le vaya bien. Creo que había muchas falencias desde que estaban los extranjeros; a veces uno se queda callado para no perjudicar a la institución. Ahora, con Erick, todo se puede encaminar y renovar la identidad morada.
