Empezó a ganarse la vida limpiando zapatos, apenas era un niño como cualquier otro con sueños e ilusiones, pero no era cualquier niño. La vida le tenía marcado un destino lleno de gloria y fama mundial.
Edson Arantes Do Nascimento, “Pelé”, la “Perla Negra”, “O Rei”, sacó provecho de sus habilidades técnicas, de sus poderosos disparos con ambas piernas y su capacidad de anticipación para deslumbrar primero al Santos de Brasil y luego al mundo entero con su calidad futbolística.
Pelé falleció este jueves a los 82 años. La noticia la confirmó su familia, que le acompañaba en el hospital de Sao Paulo, donde era tratado por cáncer.
En su biografía publicada en internet, se resalta que de aquel chiquillo de 15 años que firmó el Santos, surgió la figura del mejor y más importante futbolista de Brasil, para muchos el mejor jugador de la historia.
El niño que en las calles aprendió a dominar la pelota y fue rechazado por los principales clubes brasileños a inicios de su carrera, empezó a ser parte de la historia en 1956 cuando fichó por el Santos y de ahí tras pases, regates, remates y goles, festejó tres títulos del mundo con Brasil, al ganar las Copas del Mundo de Suecia en 1958, Chile en 1962 y el último en México en el año 1970.
Pelé debutó en la selección brasileña con solo 17 años; a esa edad y junto a Garrincha en el Mundial de Suecia, puso en marcha un juego artístico, fluido y dominador (el llamado jogo bonito) que muy poco tenía que ver con el fútbol de fuerza y pelotazo de los conjuntos anglosajones o con la improvisación de los mediterráneos.
Pelé asombró al mundo en el Mundial de Suecia 58 con su juego, su clase, su intuición, su control de la pelota y del disparo.

Pelé llegó al Mundial de Suecia como suplente, como un garoto (chico) que prometía mucho, y regresó con la aureola que rodea a las leyendas. No tardaría en ser llamado O Rei (El Rey), apodo que Pelé recibió en 1961 de la prensa francesa.
Pelé confirmaría su propio mito, ganándose la consideración de mejor jugador de todos los tiempos al liderar los triunfos mundialistas de su país en los campeonatos de Chile 1962 y México 1970.
Muchos afirman que anotó más de 1.000 goles en su carrera, aunque la FIFA dice que oficialmente el exjugador de Santos tiene registrados 757 tantos durante su carrera profesional.
A diferencia de Lionel Messi y Diego Armando Maradona, Pelé nunca se volvió leyenda de un equipo europeo; en el Santos de su país es considerado el máximo ídolo, ya que llevó al equipo paulista a ganar dos Copas Libertadores de América, dos Copas Intercontinental y seis veces la Liga de Brasil. Además de esto, el brasileño logró obtener 10 campeonatos paulistas y cuatro torneos Río-Sao Paulo.
La revista Semana de Colombia recordó que otros reconocimientos que tuvo el exfutbolista fueron ser el goleador de la Copa Libertadores de 1965, de la liga brasileña en el 61, 63 y 64, así como también ser elegido el mejor jugador del mundial de México 1970 y el mejor futbolista joven del mundial de Suecia 1958. En el año 2000 la FIFA nombró a Pelé como el mejor futbolista del siglo XX, en una decisión bastante discutida, ya que muchos aseguraban que ese premio debió ganarlo Diego Armando Maradona.
Después de retirarse definitivamente en 1977, “O Rei” recibió numerosos galardones y reconocimientos, tales como el Premio Internacional de la Paz (1978) o el de Atleta del Siglo (1980). Aureolado por una fama sin fronteras, y habiéndose convertido en el deportista mejor pagado hasta el momento, Pelé inició una carrera relativamente exitosa en el cine como actor (llegó a participar en el largometraje de John Huston Evasión o victoria, de 1981), y en la música, como compositor de varias piezas, entre las que se incluye la banda sonora completa de la película de carácter biográfico Pelé (1977).
Pelé continuó también ejerciendo una importante influencia en el mundo del fútbol desde los despachos, y en 1995 fue nombrado ministro de Deportes en Brasil, cargo desde el cual impulsó la llamada “Ley Pelé”, con la cual pretendía modificar la legislación en materia de contratos deportivos entre clubes y jugadores.
