El Barcelona resistió ante el Nápoles y vino de atrás para sacar un empate 1-1 como visitante, en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, con lo que la eliminatoria se decidirá el próximo 18 de marzo en el Camp Nou.
El belga Dries Mertens abrió el marcador tras un disparo por la escuadra en el minuto 30, mientras que Antoine Griezmann equilibró todo en el 57′, en el estadio de San Paolo. El Barça acabó con diez por la expulsión de Arturo Vidal por doble amonestación (88’).
La roja de Vidal no fue la única noticia negativa para los azulgranas, ya que Sergio Busquets tampoco jugará la vuelta por acumulación de amarillas. Mientras que en descuento Gerard Piqué se lesionó en un tobillo y será duda para el clásico ante el Real Madrid del próximo domingo.
El equipo azulgrana llevó la batuta del partido, pero se estrelló una y otra vez en el muro levantado por los locales, quienes renunciaron al balón.
Empeñado en ingresar por dentro, el conjunto culé fue presa una y otra vez en la maraña defensiva del equipo local, que esperaba tranquilamente el momento de salir al contraataque.
“Ha sido un partido igualado, ninguno de los dos equipos ha generado ocasiones de gol, ni ha encontrado, sobre todo nosotros en la primera parte, los espacios. Al final es un empate que es un buen resultado teniendo en cuenta que tenemos otro partido en casa”, explicó Quique Setién tras el partido a la televisión Movistar Liga de Campeones.
A la media hora, en una rápida salida, Piotr Zielinski le robó la pelota a Junior Firpo en la derecha, para acabar poniendo un pase al otro, donde llegó Mertens.
El belga se colocó la redonda y soltó un disparo desde la frontal, que se coló por la escuadra de Marc André Ter Stegen.
Tras el descanso, el Barcelona dio un punto de velocidad a su circulación y tuvo pronto su premio. Semedo sorprendió por la derecha y puso el balón en el área para la llegada de Antoine Griezmann, quien a bocajarro logró el 1-1 en el marcador.
El gol animó a los blaugranas, pero no desarboló al Nápoles, que siguió cerrando las llegadas visitantes para aguantar el empate hasta el final del encuentro.
El pase a cuartos de final se decidirá en tres semanas en el Camp Nou.
Bayern sentencia en Londres
El Bayern de Múnich asestó un gran golpe al vencer al Chelsea por 3 a 0 en Stamford Bridge, en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, con lo que queda en una situación muy favorable antes de la vuelta del miércoles 18 de marzo.
El internacional alemán Serge Gnabry fue decisivo en el inicio de la segunda parte con un doblete (51′ y 54′) logrado con asistencias de Robert Lewandowski, quien consiguió el tercero (76′).
El astro polaco queda de nuevo al frente en solitario en la tabla de goleadores del torneo, con 11 dianas, después de que el noruego Erling Haaland (Borussia Dortmund, ex del Salzburgo) le alcanzara a 10 la pasada semana con su doblete al París Saint-Germain.
Con su amplio triunfo, el Bayern está muy cerca de vengarse del equipo que le ganó la final de esta competición en 2012 en su estadio de Múnich.