
Una de las semifinales del Torneo de Apertura 2025 de la Liga de Ascenso se mantiene en suspenso tras una apelación presentada por el equipo Jicaral Sercoba, la cual incluso obligó a suspender el juego de ida.
Mientras tanto, Inter San Carlos recibirá este domingo a la 1 p.m. a Quepos Cambute en el partido de vuelta, en el estadio Carlos Ugalde Álvarez, luego de ganar la ida 0-3 en el estadio de Finca Damas, el jueves pasado.
La serie entre Palmares y Cariari Pococí está en el limbo a la espera de una resolución, final tras una apelación de los jicaraleños.
El domingo anterior, Cariari empató 1-1 con Jicaral en el estadio de la Asociación Cívica Jicaraleña por los cuartos de final, y en la tanda de penales los caribeños se impusieron 3-4, avanzando a la siguiente fase.
Sin embargo, el martes Jicaral presentó una apelación al considerar indebida la “alineación” del masajista José Luis Rosales, de acuerdo con el artículo 111 del Reglamento de Competición, pues estuvo en el banquillo del cuadro de Cariari a pesar de que debía quedarse fuera para darle lugar al médico Diego Rojas.
En primera instancia, el Comité Disciplinario declaró con lugar el recurso de revocatoria de Jicaral y le adjudicó los puntos, clasificándolo a las semifinales y, por ende, dejando eliminado a Cariari Pococí.
Cariari se defiende
Sin embargo, como era de esperar, el presidente de Cariari Pococí, Wagner Guzmán, apeló este viernes el recurso de revocatoria, según indicó a La Nación, y aseguró que es una injusticia lo que se está haciendo con su equipo, por lo que afirmó que llegarán hasta las últimas consecuencias.
“Es cierto que se cometió un error, pero se nos está castigando doblemente, porque se nos sancionó con ₡100.000 por el mismo hecho y después se nos quiere sacar del torneo en la mesa, debido a la incapacidad del equipo contrario de vencernos. Iremos hasta las instancias que sean necesarias: Fedefútbol, Icoder y no descarto ir al TAS, porque hay situaciones que dejan dudas”, explicó Guzmán.
De acuerdo con el jerarca del cuadro caribeño, en un principio la lista oficial de la alineación incluía a siete miembros del cuerpo técnico, como corresponde, entre ellos el masajista José Luis Rosales y el utilero Isidro Rosales, por lo que se descartó al médico del equipo, Diego Rojas.
Según expresó el dirigente del cuadro limonense, el galeno llegó tarde al estadio de Jicaral y la dirigencia de Cariari conversó con el delegado (Donald Torres) y los árbitros (Raúl Eduarte y Tomás Barrantes) para solicitar el cambio de Rojas por el masajista José Luis Rosales.
“El problema es que José Luis (Rosales), quien debía salir de la cancha, se quedó en el banco, e Isidro se fue a la grada. Isidro nos dijo que tomó esa decisión porque así se lo indicó el delegado Donald Torres. La verdad fue confuso y todos estos detalles los mencionamos en la apelación que presentamos”, dijo Guzmán.
Se intentó conocer la versión del presidente de Jicaral Sercoba, Roy Barrantes, quien manifestó a La Nación, que de momento no se estará refiriendo al caso por recomendación del abogado que lleva el proceso.
De momento, la segunda semifinal está suspendida y el Comité de Competición de la Liga de Ascenso debe tomar una decisión con respecto a la apelación presentada por Cariari Pococí.
Asimismo, Competición debe reprogramar el juego de semifinales entre Palmares y Cariari o Jicaral, para la próxima semana, lo que atrasaría una semana la finalización del campeonato de la segunda división.
