La Fiscalía le decomisó un teléfono celular al director ejecutivo del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), Cristhian Arroyo Gamboa, como parte de la misma acción judicial en que se detuvo el miércoles al alcalde del cantón de Mora, Alfonso Jiménez Cascante.
El director del Conavi figura como investigado en la causa por los presuntos delitos de pago irregular de contratos, peculado e incumplimiento de deberes en la Municipalidad de Mora, precisó la Fiscalía Adjunta de Probidad, Transparencia y Anticorrupción.
Antes de entrar al Conavi, Cristhian Arroyo Gamboa se desempeñaba como director de la Unidad Técnica de Gestión Vial de este ayuntamiento.
El martes, el Ministerio Público detuvo al alcalde, a la vicealcaldesa Ariuna Cabal Lombodorzh y al proveedor municipal de apellidos Chaves Marín. Se les investiga bajo el supuesto de que beneficiaron a ciertas empresas en licitaciones y que, en uno de los contratos, se realizaron pagos totales de las obras a pesar de que no estaban terminadas.
“Asimismo, se presume que se otorgaron dineros sin ningún tipo de permiso o licitaciones”, sostuvo la Fiscalía, la cual ya pidió medidas cautelares contra los detenidos.
Consultado por La Nación, el director del Conavi afirmó que dejó la Municipalidad de Mora hace siete u ocho meses, con un permiso sin goce de salario.
Relató que, el miércoles, él estaba de gira cuando allegados le empezaron a enviar noticias del operativo y de que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) se había llevado esposados al alcalde, la vicealcaldesa y el proveedor, además de que habían allanado la Unidad Técnica de Gestión Vial y varias casas.
“Eso me enciende las luces de alerta, me pongo a averiguar, no tengo llamadas de la Fiscalía, no tengo correos y nadie se presentó a mi casa ni al lugar del trabajo”, dijo el jefe del Conavi.
Sostuvo que, aunque no había indicios de que él estuviera imputado, su abogado le recomendó que se pusiera de forma voluntaria a las órdenes de la Fiscalía.
Al consultársele por qué lo consideró necesario, respondió que lo hizo por transparencia, “porque yo fui funcionario de la Municipalidad en ese plazo”, en referencia a los hechos bajo investigación. “Me parece un acto bastante honesto”, comentó.

Este medio también le consultó al director del Conavi si la Unidad de Gestión Vial que él dirigió tuvo relación con las licitaciones municipales que están bajo el ojo de la Fiscalía. Contestó que desconocía la información porque no ha visto el expediente.
Arroyo relató que, una vez que se puso en contacto con el fiscal del caso, él le explicó que no lo estaban buscando, pero que, por ser funcionario de la Municipalidad, el juez consideraba que “podría estar vinculado de alguna forma, hasta de testigo, si es del caso, y ellos, por un tema de protocolo, se llevan mi celular personal”.
Acordó verse con unos agentes del OIJ, quienes decomisaron el celular y le entregaron un acta.
Según insistió el director del Conavi, no vio ninguna orden de un juez. “Nadie se ha puesto en contacto conmigo, no tengo medida cautelar (...). Cuando llegué al lugar que pactamos, estaban agentes del OIJ; me dijeron que si me hubieran estado buscando, estaría preso”.
“No soy parte del proceso todavía. Nadie me ha notificado, le soy honesto, hay violación al artículo 295 del Código Procesal Penal; me extraña sobremanera que haya habido una filtración”, agregó.