El exdiputado Jonathan Prendas irá a juicio, acusado de enriquecimiento ilícito, por viajar a Barcelona, España, en 2019, financiado por un empresario de tecnología cuando era legislador.
Prendas asistió al Congreso Mundial de Móviles (MWC, por sus siglas en inglés) con un tiquete pagado por Marcos Elías Mora, quien se presentaba como consultor y vocero en innovación y tecnología, en ciudades inteligentes y seguras, y quien había sido, hasta inicios de 2018, director de Canales para Huawei Enterprise Costa Rica.
El Juzgado Penal del II Circuito Judicial de San José confirmó el auto de apertura de juicio, dentro de la causa penal 19-000010-0033-PE.
Por ahora, no hay fecha para la apertura del juicio. La oficina de prensa del Poder Judicial explicó que el expediente se debe remitir al Tribunal Penal del II Circuito Judicial de San José, donde se asignará una fecha para el debate oral, según su agenda.
Esa oficina apuntó que ese proceso lleva su tiempo.
En marzo de 2019, el entonces diputado Prendas viajó con su hermano, Francisco, quien había sido candidato a vicepresidente de la República en la campaña electoral 2018, junto con Fabricio Alvarado.
También, viajó a Barcelona el entonces asesor de Jonathan Prendas, Juan Manuel Tirado.
En marzo de 2019, la Procuraduría de la Ética Pública denunció a Prendas ante la Fiscalía General de la República, por el presunto delito de enriquecimiento ilícito y por presuntamente infringir el artículo 253 del Código Penal, que prohíbe a los funcionarios públicos recibir dádivas u obsequios.
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Dos años después, esa instancia concluyó en un informe que el excongresista violó el deber de probidad al aceptar ese viaje a España, que básicamente se considera una dádiva de parte del empresario, y nunca se la informó a la Asamblea Legislativa.
El abogado de Prendas, Ewald Acuña, explicó que, luego de una audiencia preliminar en el Juzgado Penal de Hacienda, se corrigió la existencia de dos acusaciones y quedó solo una, impulsada por la Fiscalía y por la Procuraduría General de la República, que actúa como querellante.
“No nos opusimos a esas piezas acusatorias, sino que se hizo el ofrecimiento de prueba para que, en el debate, se discutan las dos hipótesis, una de la Fiscalía de que se cometió el delito de enriquecimiento ilícito y otra de la defensa”, dijo Acuña.
La tesis de la defensa de Prendas es que el exdiputado, “en ejercicio de labores propias de su cargo, tramitó el permiso para acudir a un congreso sobre comunicación en Barcelona”.
Acuña alegó que hay documentación que acredita que Jonathan Prendas estuvo interesado, de previo y de forma posterior al viaje, en esos temas de tecnología móvil desde el punto de vista legislativo.
No obstante, en el informe de la Procuraduría Ética se determinó que Jonathan Prendas había incurrido en una “vulneración grosera” del deber de probidad.
“Nunca informó a la administración de las actividades que estaba realizando, ni contaba con un permiso expedido por órgano competente para, en calidad de servidor público, participar en el congreso señalado”, reclamó la Procuraduría en su momento.
La PEP también determinó que Jonathan Prendas dio información inexacta a la presidencia del Directorio, al afirmar que había coordinado su participación en el congreso con el Ministerio de Ciencia y Tecnología, pues el entonces viceministro de esa cartera, Edwin Estrada, afirmaba que solo se había reunido con Prendas para hablar sobre telecomunicaciones y no como daba a entender el independiente en sus alegatos en aquel momento.
En su momento, la Fiscalía General de la República solicitó información a las autoridades francesas, pues ahí habría ocurrido un hecho de interés para la investigación judicial sobre el viaje europeo de Prendas.
