A menos de cinco meses para las elecciones del 1.° de febrero del 2026, la mayoría de los costarricenses no sabe por quién votar y los candidatos reciben bajos apoyos. Así lo reveló la encuesta más reciente del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP), de la Universidad de Costa Rica (UCR), publicada este miércoles 10 de setiembre.
El estudio evidencia que ningún aspirante parte como favorito. El 57% de los encuestados dijo no tener decidido su voto. Hoy, los indecisos son la fuerza más grande en el panorama electoral.

Ese porcentaje contrasta con los niveles de apoyo de quienes sí mencionaron una preferencia para la Presidencia de la República. Laura Fernández, candidata del partido chavista Pueblo Soberano (PPSO), lidera las menciones con apenas un 12%, seguida por el presidente Rodrigo Chaves —quien no puede reelegirse por prohibición constitucional— con un 7%.
Detrás se ubican Álvaro Ramos, del Partido Liberación Nacional (PLN), con un 6%; y Ariel Robles, del Frente Amplio (FA), con un 5%.
La opción de votar en blanco o anular el sufragio también suma el 5%. Más abajo, en el margen de error, aparece la ex primera dama Claudia Dobles, de Coalición Agenda Ciudadana, con un 2%.
‘Cualquier resultado electoral es posible’
Ante el panorama actual, donde las personas indecisas marcan el ritmo de la contienda, el CIEP señala que “cualquier resultado electoral es posible”. Prevé una campaña “volátil, con altos grados de incertidumbre, llena de vértigo y poco predecible”.
Aunque Fernández encabeza la medición, el estudio recalca que la ventaja es relativa, pues el oficialismo afronta dificultades para trasladar el apoyo personalista del mandatario a su candidatura.
La mención recurrente al nombre de Rodrigo Chaves, pese a su impedimento para ser reelecto, muestra que ese respaldo no es “automáticamente transferible”.
El estudio subraya, además, que ningún aspirante que encabezó las preferencias del electorado a estas alturas, antes de las elecciones del 2014, 2018 y 2022, ganó las elecciones.
Con este antecedente, el CIEP advierte que pequeñas variaciones en las preferencias podrían alterar por completo el panorama de una contienda marcada por la indecisión y el escepticismo.
“Ganar un poco más de apoyo que los demás, por poquito que sea, puede volver competitiva una candidatura que no partía como favorita”, destaca el estudio.
El panorama para la elección de diputados y diputadas no difiere del que tiene la contienda presidencial. El porcentaje de personas indecisas es incluso mayor, del 70%, lo que anticipa que la próxima Asamblea Legislativa será igual o más fragmentada que la actual.
¿Quién representa la oposición?
Ante la consulta abierta sobre quién ejerce el principal rol de oposición al gobierno, la ciudadanía identifica mayoritariamente a la Asamblea Legislativa, la cual fue mencionada por el 33,2% de las personas entrevistadas.
En segundo lugar se ubica el PLN, con el 22,4%; seguido del Frente Amplio con 16,9%. En conjunto, esos tres actores concentran más de siete de cada diez respuestas, consolidando al ámbito parlamentario como el principal contrapeso al oficialismo.
En un segundo plano aparecen categorías más difusas, como “otro” (6%), que agrupa menciones heterogéneas, así como “el Pueblo/la sociedad/ciudadanía” (3,8%). Además, un 2,6% afirmó que “no existe oposición”, reflejando cierto escepticismo sobre la existencia de un contrapeso político claro.
Otros actores fueron mencionados con menor frecuencia: partidos políticos en general (2,4%), medios de comunicación y periodistas (2,4%), el propio gobierno o el presidente (2,2%), el Poder Judicial (2,1%) y el diputado Fabricio Alvarado (1%).
El resto de las menciones se dispersa entre líderes individuales, instituciones y categorías menores, todas con porcentajes inferiores al 1%, lo que las coloca fuera de la significancia estadística.
Los resultados evidencian que, por ahora, no hay una figura ni candidatura única identificada como oposición; el electorado sitúa ese papel principalmente en el Parlamento y en los partidos con representación legislativa.
La encuesta del CIEP tiene un nivel de confianza del 95% y un margen de error de tres puntos porcentuales para arriba o para abajo. Se realizó entre ciudadanos costarricenses con acceso a teléfono celular, lo que equivale al 97,5% de la población.
En específico, se aplicó un muestreo aleatorio que permitió realizar 1.003 entrevistas a personas mayores de 18 años, entre el 1.° y el 4 de setiembre.
