
Cuando eche a andar el nuevo servicio de tren entre San José y Heredia, los conductores de vehículos tendrán que agudizar los sentidos para evitar sustos en las intersecciones.
A lo largo de los 12 kilómetros que componen esa línea ferroviaria hay al menos 10 cruces que carecen de una adecuada señalización para alertar a los choferes de autos, motos y carros pesados.
En algunos de esos puntos la única alerta es una vieja señal de alto o una Cruz de San Andrés (en la parte posterior del alto), las cuales en algunos casos se encuentran en sitios de difícil visibilidad para los conductores.
Tanto el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer) como el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) admiten que el proyecto de tren a Heredia carece de recursos para señalización especial como agujas, semáforos o alertas sonoras.
Sin embargo, ambas instituciones difieren sobre la necesidad de contar con esa señalización.
El tren metropolitano, que viaja entre San José y Pavas, embistió a 39 vehículos (desde motos hasta camiones) entre el 2007 y el año pasado.
Recomendación. El director de Ingeniería de Tránsito, Junior Araya, sostiene que la señalización de la vía férrea está dentro del Plan Nacional de Seguridad presentado al Consejo de Seguridad Vial (Cosevi).
“Hicimos un anteproyecto, inventario y estimación de costos, pero parece que no estaba dentro del presupuesto (del Cosevi)”, manifestó Araya.
El jerarca consideró que la ausencia de los elementos de seguridad (agujas o alarmas) es un riesgo para los choferes.
Añadió que Ingeniería de Tránsito colaboró con el Incofer en la colocación de señales verticales y horizontales, pero sostuvo que la seguridad vial ferroviaria es obligación de ese Instituto.
“De hecho se lo hemos recomendado, pero son cosas que ni siquiera hay que recomendar. Esos componentes (agujas o alarmas sonoras) son lo ideal. La señalización vertical y horizontal (la única que se aplicará) es lo mínimo”, detalló.
Respuesta. Ante los cuestionamientos sobre la seguridad vial, el presidente del Incofer, Miguel Carabaguías consideró que las señales verticales son suficientes para prevenir a los conductores.
“Aunque uno no vea o escuche el tren tiene que hacer el alto, sino esta violando la ley”, manifestó el jerarca de Incofer, quien indicó que están analizando la opción de colocar reductores de velocidad cerca de la vía férrea.
Además destacó que las agujas pueden dañarse y poner en peligro a los vehículos que cruzan porque podría caerles encima.
Otro de los argumentos de Carabaguías es que las agujas pueden ser blanco de vándalos y ladrones, tal y como ha sucedido con los semáforos.
El director de la Policía de Tránsito, Germán Marín, aseguró que hay una ausencia de cultura vial en el conductor, lo que podría generar accidentes con el tren.
Sin embargo, apuntó que en este caso la prevención es responsabilidad de los choferes, pues, según dijo, deben estar atentos al cruzar por las intersecciones.
“No hay justificaciones para despistarse un segundo. En este caso hablamos del tren, pero ¿es justificable que un chofer se despiste, se salté una señal de alto y atropelle a un niño?”, preguntó Marín.
Proyecto. Los viajes en tren entre Heredia y San José comenzarían a finales de marzo, según estimó Miguel Carabaguías.
Sin embargo, la tarifa (¢355 por recorrido) es analizada por Aresep que aún tiene dos meses para pronunciarse.
El objetivo de este proyecto es brindarle una solución al usuario para desplazarse entre San José y Heredia en horas pico.
Se estima que el recorrido en tren -6 paradas- tardaría unos 30 minutos, y 18 minutos cuando el viaje sea de forma directa.
El proyecto tiene un costo total de ¢2.300 millones.