Alberto Canedo Pascua tiene doble nacionalidad, es boliviano y tico. Su papá es del país suramericano y su mamá costarricense; de pequeño vivió aquí pero luego se trasladaron definitivamente a La Paz, sin embargo, nunca ha roto el vínculo ni dejado de participar en elecciones.
Este domingo, él, uno de sus hermanos y dos hermanas acudieron a votar a la Embajada, a cumplir con el deber patrio.
“Me encanta la idea desde mi visión de afuera, elegir. Para poder votar, me contacté con mi familiapara informarme y vimos el debate (el viernes) por youtube”, comentó el investigador de mercados, de 35 años.
Aunque está fuera, Alberto no puede dejar de preocuparse por los destnos del país, pues percite que está muy polarizado. “En realidad, lo que están buscando los ticos es un balance entre derechos humanos y crecimiento económico todo se basa en eso. Da un poco de pena pensar que vaya a la inestabilidad política, en Bolivia es el pan de cada día”, comentó.
Esa inquietud surge al ver la cantidad de candidatos, pues como bien dice “fue la papeleta más larga de la historia”, lo que implicará, sin duda, una Asamblea Legislativa muy fraccionada que le complicará gobernar al futuro presidente.
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“Me hizo gracia que (José María) Figueres se esté postulando, él era presidente cuando yo vivía allá, se nota que no hay renovación y sigue siendo una figura relevante porque es número uno en la escuestas”, añadió.
En ese esfuerzo por decidirse, Alberto conversó tanto con sus parientes mayores aquí, que ya están pensionados, como con aquellos que laboran en el sector privado, por ejemplo. “Fue muy difícil porque todos tienen visiones distintas”.
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Confesó que como buena parte de los costarricenses, le costó decidirse. “Y eso que yo no tenía que votar por diputados”, dijo.
Alberto, Alejandro, Natalia y Adriana Canedo votaron a las 12: 30 p. m. (10:30 a. m. aquí). Faltó un hermano pero tuvo que viajar a Chile, mientras que su madre está en Costa Rica.
Todos ejercieron el sufragio “con la esperanza de que me vengan mejores días”.