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La exdiputada Ivonne Acuña Cabrera (2018-2022) ignoró las peticiones que le ha hecho la administración de la Asamblea Legislativa para que devuelva ¢3,2 millones de recursos públicos que gastó en gasolina de forma irregular, en noviembre del 2021, pocos días antes de irse del país para no regresar.
Así consta en una notificación publicada el lunes en el alcance 136 del diario oficial, La Gaceta, donde se ordena abrir un procedimiento administrativo de cobro para conseguir que la psicóloga de 42 años devuelva los recursos con que pagó gasolina que, presuntamente, no era para ella.
La notificación del procedimiento se realizó públicamente por la imposibilidad de contactar a la excongresista, de quien se desconoce su paradero. En estos casos, la normativa establece una notificación en el diario oficial y, de resultar infructuosa, se remitiría el caso a la Procuraduría General de la República (PGR, órgano que funge como abogado del Estado) para que presente un proceso de cobro judicial.
A partir de la publicación de La Gaceta, Acuña tiene un plazo de 15 días hábiles para presentarse y objetar el cobro, con las pruebas que estime convenientes. Si en 20 días ella no ha aparecido, el caso va a manos de la PGR.
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En marzo del 2022, La Nación dio a conocer que Acuña Cabrera había pagado más de ¢3 millones en combustible, según los registros de la tarjeta que la Asamblea le dio para ese gasto, bajo una modalidad de “prepago” en una gasolinera.
La estación de combustible facturaba un monto y la diputada dejaba una lista de personas que podían pasar a pedir combustible con base en lo que ya ella había pagado previamente.
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El departamento de Asesoría Legal de la Asamblea enfatizó que este tipo de pago adelantado de combustible es improcedente, pues el gasto “debe funcionar como una transacción de una tarjeta de débito, únicamente para compra de combustible al momento del consumo” en apoyo a las funciones del legislador.
Acuña salió del país el 11 de diciembre del 2021 y nunca regresó a ejercer sus labores como congresista, cargo cuyo plazo venció el 29 de abril del 2022. Además del gasto irregular en combustible, se le pagó remuneración en dietas y gastos de representación, igualmente de forma irregular.
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Antes de que dejara su cargo, la administración legislativa comenzó el proceso para que Acuña devolviera el dinero y, si bien devolvió pagos por ¢2,9 millones por dietas y gastos de remuneración, ignoró las peticiones del Congreso para que devuelva el gasto que se hizo en combustible.
La gerenta general a. i. del Congreso, Karla Granados, explicó que el proceso administrativo ha llegado a este punto porque no hay noticia sobre el paradero físico de Acuña ni respuesta sobre los cobros que se le han hecho.
“Lo que sigue quedando descubierto es el gasto de gasolina. Necesitamos que se cubra esto para dar por cerrado este asunto. Como no ha atendido los dos intentos de cobro anteriores, se tuvo que recurrir a la publicación del proceso de cobro administrativo”, dijo Granados.
Ivonne Acuña se convirtió en diputada en los comicios del 2018 con el Partido Restauración Nacional, que, además del Congreso, también la postuló para la segunda vicepresidencia de la República junto al candidato presidencial Fabricio Alvarado. El 22 de abril del 2020 se declaró diputada independiente.
