El alcalde de la Municipalidad de Alajuela, Roberto Thompson Chacón, aseguró que, tras su llegada a la alcaldía, encontró “un problema grave de ejecución presupuestaria. Según dijo, halló un superávit acumulado de $150 millones (¢80.000 millones).
Puso como ejemplo que, en el 2023, solo se ejecutó el 19% del presupuesto asignado para obras de inversión. Del total de ¢45.638 millones, solamente se gastaron ¢8.985 millones. Una dinámica parecida ocurrió en años anteriores.
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Además, dijo el alcalde, no se renovaron contratos clave para la compra de materiales y recuperación de la red vial cantonal.
“Esto nos coloca en una situación desventajosa desde el punto de vista de inversión y ejecución presupuestaria”, señaló Thompson en una entrevista con La Nación.
Francisco Sánchez Gómez, presidente del Concejo Municipal alajuelense, añadió que “no es posible que el dinero no se invierta”.
“Esta municipalidad viene en una crisis muy grande desde el 2010. La subejecución presupuestaria ha sido significativa”, sostuvo Sánchez. Dijo que, de cada 10 colones destinados a invertir, solo se han gastado dos.
Consultado por La Nación, Humberto Soto Herrera, exalcalde del cantón Central de Alajuela, afirmó que “no le parece conveniente hablar del tema” pues ya no es más el alcalde del cantón.

Se olvidaron las obras grandes
Según Thompson, Alajuela necesita priorizar para mejorar la ejecución de presupuestos. “Alajuela fue líder en programas de desarrollo local para atender las necesidades de las comunidades, pero se olvidó de las obras grandes,” dijo.
De acuerdo con reportes de Hacienda, la Municipalidad alajuelense cuenta con más de $100 millones en valores a corto plazo que no se ejecutaron, y además, el año pasado recibió cerca de ¢5.000 millones solo en intereses. Thompson adelantó que la Municipalidad trazará una ruta para reorganizarse internamente y presentarle a la ciudadanía obras de “gran impacto” que mejoren la competitividad del cantón.
La seguridad es otro tema que el cantón Central de Alajuela busca reordenar. Según afirmó Thompson, la Municipalidad invierte aproximadamente ¢1.800 millones en un contrato de cámaras de vigilancia, adjudicado en la administración anterior, pero la falta de monitoreo continuo y de personal especializado hacen que los esfuerzos sean insuficientes por el momento.
Pese a esto, el alcalde alajuelense menciona tres áreas por abordar:
- Prevención: Una mesa operativa a cargo de la vicealcaldesa, para atender a habitantes de la calle e intervenir puntualmente en zonas que lo requieran.
- Mejoramiento urbano: Iluminación en parques y zonas públicas en distintos puntos de la ciudad, para que los espacios públicos vuelvan a ser puntos de reunión de los alajuelenses.
- Coordinación con otras dependencias: Mediante una reunión con el comisionado Alvarado, director regional de la Fuerza Pública, se expresó la intención de retomar la coordinación interinstitucional de respuesta. Con el nuevo edificio de la Policía Municipal, se espera llevar a cabo un nuevo centro de monitoreo, incluido en la próxima contratación de cámaras de vigilancia.
Thompson, elegido por el Partido Liberación Nacional (PLN), añadió que el centro de monitoreo contará con el apoyo de la Embajada de Estados Unidos, que brindará equipo y capacitación.
En la misma línea, el Concejo Municipal busca colaborar con la alcaldía. Su presidente, Francisco Sánchez, del partido Renovemos Alajuela, se refirió a cómo será su relación con respecto a los proyectos que busca implementar la Municipalidad.
“No venimos a obstruir, venimos a proponer, a colaborar en muchas cosas que se ocupan por parte de la alcaldía. Tiene que pasar por el Concejo, y el Concejo está en la mayor disposición de hacerlo, pero ordenadamente, transparentemente y eficientemente”, afirmó Sánchez.
Además, agregó estar dispuesto a firmar los convenios necesarios con Conavi, el Ministerio de Seguridad, IMAS y el IAFA, pero aclaró que trabajarán en conjunto, esperando la ejecución por parte de la alcaldía.
