Cuatro obras viales necesarias desde hace años en Liberia, Heredia, la zona norte y la Costanera seguirán en espera, pues el gobierno de Rodrigo Chaves las transferirá a la próxima administración, aunque sin dejar listos el financiamiento ni procesos de licitación necesarios para su ejecución.
La intención del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) es dejar esos proyectos “maduros”, con las fases de estudios y preingeniería completas, afirmó Mauricio Batalla Otárola, jerarca del MOPT.
Las obras que dejarían para el gobierno que comienza en 20 meses, el 8 de mayo del 2026, son:
- Tramo de la ruta 21, que pasa frente al aeropuerto Daniel Oduber, en Liberia, Guanacaste.
- El sector de la ruta 34 (Costanera) que va desde la salida de la ruta 27 hasta Jacó.
- El corredor noratlántico en la ruta 4 (zona norte).
- La radial a Heredia. Esta obra ha sido planificada desde hace varios gobiernos, incluso, durante la ejecución de la Circunvalación Norte se dejó previsto un entronque cerca de la León XIII, en Tibás.
A esos proyectos, se suman otras cinco grandes obras que tiene en sus manos esta administración desde el 8 de mayo del 2022, pero que deberá completar el próximo gobierno: las carreteras de San José a San Ramón y hacia Cartago; las ampliaciones de Limonal-Barranca y San José-Caldera y la nueva vía a San Carlos.
Olman Vargas Zeledón, director del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), advirtió que, en cuanto a los cinco proyectos que el gobierno actual planea dejar con orden de inicio, lo fundamental para que estos sean viables es resolver primero el tema del financiamiento.
Opinó, además, que el caso de los proyectos “maduros”, se está dejando por fuera la ampliación de la Interamericana Sur, la cual, afirma, resulta más urgente que varias de las cuatro obras mencionadas.
‘Responsablemente’
Mauricio Batalla aseguró el pasado 26 de agosto, tras comparecer ante los diputados de la Comisión Legislativa de Infraestructura, que tiene la intención de dejar al menos cuatro proyectos “maduros” para que el próximo Gobierno se encargue de buscar los mecanismos de financiamiento y gestionar los procesos de licitación necesarios para su ejecución.
La meta dijo, es que estos proyectos completen las fases de estudios y preingeniería, e incluso sean incluidos en el banco de proyectos del Ministerio de Planificación (Mideplán), debido a que actualmente, no existe un portafolio de proyectos listo para ser ejecutado a mediano plazo.
“Nosotros como administración lo que tenemos que hacer responsablemente es dejar cuatro o cinco proyectos dentro del banco de proyectos de Mideplán (Ministerio de Planificación) para que la futura administración pueda venir y buscar los recursos para echar para adelante estos proyectos”, manifestó el 26 de agosto.
El viceministro de Infraestructura, Efraím Zeledón, aseguró que se están negociando fondos con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) para obtener una cooperación no reembolsable cercana a $1 millón, con el fin de completar los estudios necesarios para dichas obras. Batalla también informó que el plan fue discutido con expertos de la Cámara de la Construcción, el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) y el Grupo Consenso.
“Es muy difícil ir a un organismo internacional a pedir un crédito para un proyecto que no tiene perfil ni prefactibilidad, entonces eso es lo que queremos hacer dejando todo el portafolio de proyectos maduro”, afirmó Zeledón a finales de agosto, durante una conferencia de prensa.
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El Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) había aprobado a finales del 2023 la inclusión de fondos para las etapas de preinversión de varios proyectos dentro de un crédito gestionado con el BCIE, llamado “GAIN” (Gestión de Activos de Impacto Nacional). No obstante, este financiamiento fue finalmente descartado. Entre las obras previstas estaban la radial Lindora y los puentes peatonales de la ruta 32.
Obras por completar
Además de los proyectos que el MOPT planea dejar “maduros”, la próxima administración tendrá que concluir obras que el gobierno actual espera dejar con orden de inicio. No obstante, en varios casos, no existe certeza sobre el futuro de dicha infraestructura.
Una de las obras es la carretera a San Carlos, que, según los planes del Ministerio, tendría adjudicados el próximo año tanto la punta sur como el tramo central. Si no hay retrasos en el proceso de licitación, los trabajos podrían iniciar antes de mayo de 2026.
El corredor San José-San Ramón se encuentra en una situación similar, aunque más incierta, ya que su nuevo modelo de financiamiento aún no ha sido aprobado por el Ministerio de Hacienda. Esto ocurrió después de que el Poder Ejecutivo decidiera cancelar el fideicomiso con el Banco de Costa Rica y solicitara un nuevo estudio de optimización sobre el anteproyecto presentado por dicho fideicomiso.
Otro proyecto que se suma a la lista es el tramo de la carretera Interamericana Norte, entre Barranca y Limonal, el cual quedó suspendido desde setiembre del 2022 y sin financiamiento después de que parte del crédito destinado a su ejecución fuera transferido a la carretera de San Carlos. Actualmente, la realización de este tramo depende de la aprobación para redirigir recursos del préstamo otorgado por el BCIE al Fondo de Avales, establecido tras la pandemia.
En ambos casos, tanto el corredor San José-San Ramón como el tramo Barranca-Limonal, se deben comenzar nuevos procesos de licitación.
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En el Consejo Nacional de Concesiones (CNC) aún quedarían pendientes proyectos como la ampliación de la ruta 27 (San José-Caldera). De acuerdo con Batalla, se reanudaron las negociaciones con la concesionaria Ruta 27 (anteriormente Globalvia) aunque la discusión sobre la extensión del contrato, necesaria para que la empresa se haga cargo de las obras, podría extenderse por un año más.
Tampoco hay certeza sobre el inicio de las obras para la tan esperada ampliación de la vía San José-Cartago, donde recientemente se optó por “revivir” la iniciativa privada presentada por la constructora MECO. Dicha propuesta, que había sido descartada hace solo un año, deberá pasar por un proceso de licitación si es finalmente aprobada por el gobierno.
‘Proyectos deben trascender administraciones’
El director del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), Olman Vargas, considera indispensable que la Administración no solo inicie los procesos para los futuros proyectos, sino que también se asegure de que estos sean sólidos.
“Siempre es importante la continuidad entre las diferentes administraciones de una serie de proyectos. Por el periodo de vida, desde que se hace una factibilidad básica, un proceso más detallado de planificación, búsqueda de financiamiento y después el diseño y construcción, normalmente los grandes proyectos trascienden a dos y hasta tres administraciones”, afirmó.
Vargas subrayó que, aunque “no es aceptable” heredar obras sin financiamiento, esta ha sido la “costumbre en muchos años” en el sector de infraestructura vial, lo que contribuye a la “crisis” que enfrenta el país en este ámbito.
Además, agregó que a esta problemática se añaden los cambios introducidos por los distintos gobiernos en cuanto a las condiciones o enfoques previamente establecidos para cada una de las grandes obras, muchas de las cuales han estado en proceso durante años.
Según Vargas, en los casos de la ruta 27 y el corredor San José-Cartago, es fundamental que las negociaciones para las futuras concesiones queden bien blindadas. En cuanto al tramo Barranca-Limonal, se debe establecer con precisión el uso de los recursos que provendrían del Fondo de Avales. Además, el proyecto San José-San Ramón necesita claridad sobre el modelo de financiamiento que se adoptará para su ejecución.