
Un grupo de 12 estudiantes de la Universidad de Costa Rica que se encontraban en la reserva indígena de Cabagra, en Buenos Aires de Puntarenas, fue atacado por hombres que les dispararon directamente.
A la alumna Alejandra Cartín se le introdujo una astilla de piedra en el ojo izquierdo, mientras que a Fernando Roldán y Manrique Sibaja una bala les rozó en un brazo.
Los jóvenes se mostraron sorprendidos por el hecho de que alguien haya querido atacarlos, ya que ellos se encontraban en la localidad trabajando en un campo organizado por la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica.
Los afectados ya denunciaron el hecho en la alcaldía de Buenos Aires, y pidieron a los funcionarios del Ministerio de Seguridad Pública y a la Guardia Rural de la localidad, hacer una investigación exhaustiva.
Un indígena del lugar, Gumercindo Torres Torres, estaba con ellos, ya que los guiaba hacia la población más cercana: el pueblo de Brujas. Además, se encontraba con ellos su pequeño hijo de cuatro años, Ovidio Torres Morales, quien no resultó herido.
Los otros estudiantes: Hernán González, Humberto Espinoza, Alejandro López, Carlos Acuña, Rafael Gómez, Juan Carlos Alpízar, Sonia Guevara y Héctor Ferlini denunciaron que los indígenas se encuentran en estado de abandono total. Manifestaron que los niños están desnutridos y que no reciben ni la más mínima atención médica.
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