
Miles de usuarios en Moravia, Goicoechea y Tibás se verán afectados por cortes de agua. Una falla en el motor principal del acueducto de Guadalupe, según el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) a 300 metros de profundidad, provocará la suspensión del servicio al menos por tres días.
Así lo confirmó este domingo el AyA por medio de un comunicado oficial, en el que calificó los trabajos de reparación como “de alta complejidad” y adelantó que las labores podrían extenderse hasta el próximo miércoles 11 de junio.
La supuesta profundidad del motor afectado generó escepticismo entre varios usuarios, quienes expresaron sus dudas directamente en la cuenta oficial de Facebook del AyA.
“¿300 metros de profundidad? ¿Será 3 metros? Comprendo que se den ‘pequeños errores’“, comentó Harvey Alvarado. ”¿Un motor a 300 metros de profundidad? Wow. No lo sé Rick, quisiera más información", escribió Germán Solís.
Pese a las dudas, la institución reiteró que los sistemas de acueductos en la Gran Área Metropolitana (GAM) están interconectados, lo que permitirá realizar trasiegos de agua desde otras zonas para reducir el impacto.
“Durante las últimas horas, nuestros equipos técnicos han estado trabajando arduamente en la estrategia de operación del acueducto de Guadalupe. Estos trabajos podrían tardar hasta tres días”, informó la entidad en su mensaje a los afectados.
La institución también anunció que divulgará una programación de racionamiento para los sectores afectados, con horarios específicos. Sin embargo, adelantó que el distrito de San Vicente de Moravia quedaría sin servicio desde la tarde de este domingo, con una reanudación paulatina durante la noche.
El AyA hizo un llamado a la ciudadanía para que almacene únicamente el agua necesaria para sus necesidades básicas, con el fin de facilitar una distribución más equitativa y evitar prolongar los cortes.
No obstante, la medida no calmó la frustración de numerosos usuarios, quienes cuestionaron la planificación y la calidad del servicio.
“Recibos más altos sin justificación alguna y con las lluvias caídas no se justifica recorte alguno. La capacidad de respuesta ante las averías es mínima, por lo visto”, criticó Ana Cristina Calderón Valverde.
“Esta institución está cada día peor. El agua re cara y una planificación que da vergüenza. Tantos años y en lugar de mejorar”, añadió Rándall Tenorio.
Grettel Salazar, por su parte, denunció una fuga sin reparar: “En el medidor de mi casa ya se cumplieron 13 días de que hemos reportado una fuga todos los días. El desperdicio ha sido día y noche y no han venido a arreglarla”.
El AyA indicó que continuará informando en sus canales oficiales y en su sitio web: www.aya.go.cr.
Esta no es la primera vez que la planta en Guadalupe pone en aprietos a la entidad y genera molestias a los abonados.
A finales de enero del año pasado, el agua que recibieron por varios días vecinos de Tibás, Moravia y Goicoechea tenía restos de un hidrocarburo llamado xileno, según confirmó entonces el AyA.
