Estudiantes del Liceo Napoleón Quesada, en Guadalupe, impidieron con un candado la entrada en su colegio este lunes, por el mal estado de sus instalaciones.
También bloquearon dos de los tres carriles de la carretera.
Las protestas iniciaron luego de que 20 aulas y el gimnasio fueran clausurados por el Ministerio de Salud el 8 de marzo, lo que obligó a las secciones a compartir aulas y a recibir clases en condiciones de hacinamiento.
Además, educación física se ha impartido bajo el sol y en aulas particulares.
Randall Pérez, maestro de Inglés, describió que los cielorrasos están en malas condiciones, cuando llueve hay goteras y las bases del gimnasio están corroídas.
El Ministerio de Educación Pública (MEP) confirmó que desde el 2016 había ¢3.662 millones disponibles para las obras, las cuales no se concretaron. Tres años después, ¢554 millones más son requeridos producto de la devaluación, dinero que deberá pedir el Ministerio a la Asamblea Legislativa en un presupuesto extraordinario.
“Hemos ido a reuniones con el MEP, nos ponen fechas, muchas palabras, pero no nos dan respuestas”, aseguró Jeancarlos Díaz, uno de los líderes estudiantes.
Díaz añadió: “Desde que estoy en sétimo está este problema, ahora estoy en quinto y vea, no se ha solucionado”.
“Los profesores se tienen que desplazar, entonces llegan tarde, la gente no cabe en los pasillos, va pasando y se va golpeando”, afirmó Niurka Morales, de undécimo año.
“Quieren acumular en un aula a muchas personas, y ya somos muchos en el colegio”, manifestó Zomy Jiménez, de décimo año.
El colegio tiene más de 1.000 estudiantes, y cerca de 30 por sección, por lo que un aula con dos grupos puede llegar a tener hasta 60 personas.
Según María Alicia Rivas, profesora de Español, han aumentado las riñas entre alumnos por el estrés que les genera pasar aglomerados. También se ve afectada la banda del colegio, pues los instrumentos se guardan en el gimnasio y no se pudieron sacar antes de la clausura.
Primer acuerdo
Personeros del MEP se reunieron con representantes estudiantiles en la dirección regional San José Norte durante la mañana y tarde de este lunes.
En el encuentro acordaron la vuelta a clases de los alumnos y el inicio de trámites “de manera ágil y comprometida” para remodelar el área afectada, confirmó la directora de Infraestructura y Equipamiento Educativo del MEP, Andrea Obando.
Los trabajos estarán a cargo de la empresa Navarro y Avilés.
Asimismo, se elaborará un plan remedial para atender la orden sanitaria con fecha al 30 de mayo, que cerraría otra sección del colegio, incluido el comedor.
Andrés Orozco, presidente del Gobierno Estudiantil, apuntó que el acuerdo también incluye que “si ellos (el MEP) incumplían con algo de lo que nos prometieron, nosotros íbamos a volver a manifestarnos”.