Escuchar
Moscú. Aunque el gobierno de Vladimir Putin todavía no define una postura sobre la propuesta de Washington para lograr una tregua temporal con Ucrania, sí puso sobre el tapete tres condiciones concretas.
Moscú pide la rendición de Ucrania, que Kiev renuncie a su pretención de integrar la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y que reconozca el control ruso de los territorios ocupados.
Putin no cree en una tregua temporal, que según él no resolvería las “causas profundas” del conflicto.
“Estamos de acuerdo con las propuestas para poner fin a las hostilidades, pero partimos de la base de que esta tregua debe conducir a una paz duradera y abordar las causas profundas de esta crisis”, dijo el viernes.
El mandatario se cuidó de no rechazar por completo la propuesta de Donald Trump, pero mencionó que hay “asuntos importantes” aún por resolver.
Al respecto, Volodimir Zelenski, presidente ucraniano, denunció las declaraciones “manipuladoras” de Putin, acusándolo de buscar “alargar las cosas”.
Mediante un mensaje en la red X, Zelenski acusó a su homólogo ruso de “sabotear la diplomacia” poniendo condiciones “extremadamente difíciles e inaceptables desde el principio, incluso antes de un alto el fuego”.
“Vemos que es Rusia la que quiere continuar su agresión, continuar la guerra. Ucrania dijo claramente ‘sí’ al alto el fuego”, declaró el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Andrii Sybiga.
LEA MÁS: Ucrania llega a acuerdo con Trump para permitir a Estados Unidos explotar sus tierras raras
Aunque calificó las declaraciones de Putin de “muy prometedoras”, Trump advirtió que sería “muy decepcionante” que Rusia rechace su plan.
“Me encantaría reunirme a hablar con él”, aseguró, “pero tenemos que resolver la cuestión de la tregua rápidamente”, agregó el nuevo inquilino de la Casa Blanca, refiriéndose al presidente ruso.
Putin envía mensaje a Trump
El Kremlin anunció este viernes que Putin envió un mensaje a Trump a propósito de la tregua temporal que Estados Unidos propone en Ucrania, y que espera nuevas conversaciones con Washington al respecto.
El presidente estadounidense propuso un alto el fuego en Ucrania de 30 días, una idea aceptada por Zelenski, presionado por Washington desde que Trump lo abroncó públicamente, en febrero, en el Salón Oval.
Trump, quien ha adoptado la mayoría de propuestas rusas, para disgusto de Kiev y de Europa, quiere conseguir un cese de las hostilidades lo antes posible. Pero el presidente ruso no parece estar de acuerdo, teniendo en cuenta que sus tropas están en situación de ventaja en el terreno.
En este contexto, Putin recibió la noche del jueves al emisario estadounidense Steve Witkoff, quien le entregó un mensaje de Trump.
Tras esto, el mandatario ruso “transmitió por medio de Witkoff informaciones e indicaciones suplementarias, dirigidas al presidente Trump”, anunció el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, quien se dijo “prudentemente optimista”, en su comparecencia diaria a los medios.
LEA MÁS: Putin condiciona apoyo a tregua con Ucrania y Trump le responde
“Cuando el señor Witkoff entregue todas las informaciones al presidente Trump, determinaremos el momento para una conversación” entre los dos mandatarios, añadió.
Ataques nocturnos
Sobre el terreno, la situación sigue evolucionando en la región rusa de Kursk, fronteriza con Ucrania, donde las fuerzas de Kiev lanzaron una ofensiva sorpresa el pasado agosto y llegaron a reivindicar el control de 1.400 kilómetros cuadrados.
Kiev esperaba usar ese avance como moneda de cambio en una negociación con Moscú, que ocupa un 20% de su territorio.
Pero en las últimas semanas, el Kremlin ha seguido recuperando terreno en Kursk y, el viernes, el ejército ruso reivindicó la reconquista de la localidad de Goncharovka.
Rusia siguió también bombardeando Ucrania la noche del jueves, como lo hace casi cada noche desde que Putin ordenó a sus fuerzas el asalto a Ucrania, el 24 de febrero de 2022.
Las fuerzas ucranianas, que responden con ataques de drones, indicaron que golpearon por la noche un depósito de misiles en la región fronteriza de Belgorod y dos estaciones de compresión de gas situadas a cientos de kilómetros del frente.
