Ciudad de Guatemala. ACAN-EFE , AFP y AP. La corrupción y el crimen organizado, incluido el narcotráfico, juegan un papel activo en el financiamiento de los partidos políticos, que también cuentan con aportes del empresariado y entidades estatales.
Ese respaldo pecuniario, dijo la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) , se caracteriza por la falta de transparencia y la ilegalidad, y quienes proveen recursos lo hacen con un fin común y compartido: procurarse el enriquecimiento propio.
Tales señalamientos son parte de un informe denominado El financiamiento de la política en Guatemala , dado a conocer el jueves por la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) , un órgano independiente de carácter internacional cuya misión es apoyar a las autoridades policiales y judiciales del país a combatir el delito y fortalecer la Justicia.
De acuerdo con el documento, el 25% del financiamiento a la actividad política proviene de estructuras criminales, sobre todo del narcotráfico; otro 25% tiene como fuente al sector privado y el restante 50% procede de instituciones del Estado.
Pero el jefe de la Cicig, el colombiano IvánVelásquez, advirtió una paradoja: “Los recursos públicos financian la política, pero por la vía de la corrupción”.
Tentáculos. Cicig resaltó que en la participación privada en el respaldo a los partidos y sus actividades, el crimen organizado y las redes político-económicas ilícitas –encabezadas por el poder regional y local– constituyen dos factores imprescindibles para entender la coyuntura.
Velásquez puntualizó: “Está el crimen organizado directamente vinculado. Son estructuras dedicadas al narcotráfico que han penetrado la política y la institucionalidad pública por medio del financiamiento de campñas electorales”.
Velásquez ve un riesgo para el orden social que las personas que concentran el poder económico posean también el político.
Esta particularidad, indicó el comisionado, provoca que la política se organice entorno “a personas y no a proyectos” , y favorece el transfuguismo político, además de que convierte a Guatemala en un país “propicio” para cometer delitos electorales “sin ninguna consecuencia” .
Otro de los factores claves son las campañas electorales, que concentran gastos “excesivos y desproporcionados” .
El comisionado recomendó impulsar varias reformas al sistema electoral, entre ellas frenar ese exceso de gasto en que ha incurrido los partidos, situación que permite la infiltración de recursos ilícitos.
Consideró que el aporte privado debe reducirse “a una mínima expresión” que no supere el 20% del total del presupuesto autorizado a los partidos, y la asignación de fondos públicos, a la que tienen derecho, “debe ser limitada, regulada y fiscalizable”.
Burla a la población. Horas después de la presentación del informe, la Embajada de Estados Unidos comentó que el texto “deja claro que la clase política ha estado burlándose de la población”.
Guatemala, “como hemos dicho antes, padece de instituciones débiles en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, y en la auditoría” de estas. “Este informe ilustra lo que ocurre cuando se le da a las instituciones débiles la tarea de controlar a los actores corruptos” , añadió.
Guatemala irá a elecciones presidenciales, legislativas y municipales el 6 de setiembre.